¿Qué caracteriza al sistema político suizo?
Suiza, uno de los países más ricos e igualitarios del mundo y en la cúspide de respeto a la libertad humana, tiene un sistema político envidiable que cualquier país debería imitar.
1. Descentralización
Suiza es una confederación integrada por 26 regiones, llamadas cantones, que son totalmente independientes entre sí, compartiendo estas regiones únicamente el ejército, la política exterior, la moneda y la Constitución.
Gracias a esta descentralización, cada cantón puede ajustar sus leyes a las necesidades y peculiaridades de cada cantón. Un efecto de este sistema totalmente descentralizado es la competencia que origina entre los diversos cantones por ofrecer el mejor marco legal, lo que explica que todos los cantones suizos tengan impuestos bajos.
2. Sin Presidente del Gobierno ni Jefe de Estado.
Todos los Estados tienen un Presidente o Jefe de Estado, a excepción de Suiza. Los suizos votan cada 4 años a su parlamento nacional, y el parlamento elige, a su vez, a 7 de entre sus miembros para conformar un "Consejo de Ministros" llamado Consejo Federal. Cada año, una de estas 7 personas es la encargada de representar a Suiza en el exterior, siendo este el "Presidente", sin ninguna otra facultad o poder excepcional sobre el resto de miembros del Consejo Federal.
3. Democracia directa
En Suiza, la mayoría de decisiones políticas importantes se someten a referéndum, tanto a nivel nacional como cantonal. Cualquier ciudadano puede someter una ley a referéndum si consigue 50.000 firmas, y si el referéndum versa sobre la modificación de la Constitución, se requieren 100.000 firmas. Normalmente, se vota 4 veces al año en referéndum, votando sobre todos los referéndums que se han ido proponiendo desde el último celebrado.
Los referéndums suelen tener una participación mayor al 60%.
4. Libre mercado
Suiza lleva comerciando libremente desde 1874, siendo uno de los países más abiertos a la globalización. Es el tercer país con mayor libertad económica en el planeta, por detrás de Hong Kong y Nueva Zelanda.
5. Neutralidad
Suiza es uno de los pocos países neutrales que hay en el mundo, y nunca interviene en ningún conflicto armado, inclyendo las dos guerras mundiales libradas a su alrededor, a pesar de ser uno de los países en los que es legal portar armas.
6. Bajos impuestos
Aunque cada cantón tiene su autonomía tributaria, la fiscalidad general de Suiza es baja. La renta se grava una media del 20%, incluyendo cotizaciones sociales. El consumo se grava en torno al 8%.
7. Tejido empresarial
A diferencia de lo que muchos piensan, Suiza no dedica su economía a la prestación de servicios financieros y bancarios. Cierto es que el peso del sector financiero en Suiza es del 10% del PIB, por el 4% español, pero ello no explica su riqueza. Son el sector manufacturero, con un 18%, el comercio, con un 14%, y el sector servicios, con otro 14%, los que se reparten la mitad de la economía suiza. Destacan las farmacéuticas Novartis Ag-Reg y Roche Hldg-Genus y la mayor agroalimentaria del mundo, Nestlé, siendo estas las 3 mayores empresas europeas por capitalización bursátil. 27 de las 250 mayores empresas europeas son suizas, por 16 de España, aun con una población 6 veces más numerosa.