No me puedes decir en la primera frase que eres un manazas y te defiendes bien... es como inteligencia militar, o flamer educado, términos opuestos.
PD: Lo primero es saber que plato es su preferido. Con eso tienes un 50%
Ni caso a #61
El nombre del plato tiene poco o nada que ver con el resultado en sí y el sabor de éste. Es como comparar una hamburguesa del McDonalds con una de fabricación casera; o unas patatas fritas aderezadas con el sudor de quien las ha pelado, con unas que vengan congeladas.
Que conste que yo prefiero las hamburguesas del McDonalds, las pizzas del Telepizza y el pollo de Kentucky. En el ámbito de la comida las multinacionales han conseguido dar con mi sentido del gusto, algo que no ha conseguido ninguno de mis familiares del sexo débil en 33 años.
¿De que cojones hablas?, ¿no piensas como yo y ya no se me tiene que leer o algo?
Saber que le gusta es vital. Si le gustan las hamburgesas no vas a hacerle una puta mierda, te la currarás o no hagas nada. No se que tiene que ver lo que tu dices con lo que dicho por mi yo no hablo de nombres de platos sino de platos en sí.
No es que le preguntes, ¿te gusta el arroz?
Sino: ¿Como te gusta el arroz? ¿de que tipo?, etc..
#62 Usa tu cerebro antes de hablar, te vendrá mejor.
Un saludo.
#63 Si tuvieses autoestima no reaccionarías con tanta agresividad a un comentario tan sosegado.
Me parece que no me has entendido: que te guste una hamburguesa no tiene que ver con que se llame hamburguesa sino por cómo la hagan, así con todas las comidas. De ahí que saber el nombre de su plato preferido carezca de relevancia, pues dependiendo de cómo se haga puede tener muy diferentes sabores (ni mejores ni peores, el gusto es relativo) hasta el punto de que le pueda gustar o de que se le quiten las ganas de comer.
No hablo en términos tan extremistas de spaghetti carbonara a spaghetti bolognesa, sino que simplemente el hecho de pasarte con una especia o quedarte corto tiene más repercusión en el paladar de la que imaginas.
Espero que ahora lo entiendas y bajes los humos, porque estás quemado y yo no veo fuego por ninguna parte.
Ni te he leido mas que la primera linea y he tenido suficiente de tu tonteria sin sentido. Autoestima? sigues mezclando la velocidad con el tocino.
No puedo pedirle mas a quien no da más.
Para mi ha terminado la "conversación" si es que lo que se tiene contigo puede considerarse como tal.
Un saludo.
Un extracto de la web de #2
Espárragos - Ir a la página de espárragos.
Su forma fálica ayuda a considerar al espárrago como comida afrodisíaca. Hervidos o la vapor surten el mejor efecto.
Y una polla! Comer esparragos empeora ( un huevo) el sabor de tu champu de huevo. Asi que si quieres que se lo trague no comas TU esparragos
Sin entrar a convertir esto en un debate sobre si la comida de las multinacionales es mejor o peor que la casera, que a mi me van ambas por igual, te digo que te hago una hamburguesa o una pizza casera y te explotan los huevos del gusto. El pollo frito tal cual, lo dejo para KFC, a mi me gusta frito con especias u horneado.
Y respecto a #1, yo te aconsejo que no te esfuerces demasiado, es decir, si te gusta hacer las cosas bien, hazlo lo mejor que puedas, sino, ella ha accedido a quedar contigo y creo que la comida, aún siendo importante, va a ser algo secundario, la estrella debes ser tu.
Eso si, donde tienes que triunfar, es en el postre, para mi muchísimo más importante que la cena en si, y no me refiero al postre-postre, que ahí tambien hay que darlo todo.
Ale, me voy a ver Wimbledon.
#65 Claro, la conversación termina en el momento que te quedas sin argumentos. Espero que algún día descubras el concepto de asertividad y lo pongas en práctica, harás menos daño a los demás y sobre todo te haras menos daño tú.
#67 Lo mejor del Wimbledon es que cada cierto tiempo un fanático entra a la cancha y apuñala a una tenista, pero para ver un partido de esos antes tienes que tragarte unos coñazos del copón.
No me la juego, me voy a los clásicos, cojo pasta y la aderezo con alguna salsa que leo en alguna receta o voy juntando algo de tomate con albahaca, orégano, hierbas provenzales y un sazonador que me encanta, pollo cortado o carne picada al punto (si se pasa la jodiste) y queso del que se funde en un cuenco al lado.
De postre pannacotta.
No hago mucha cantidad porque la pasta hincha mucho y luego el "post-cena" te hará querer vomitar si te atiborras.
