Lavar y marcar en el prostíbulo
Arrestadas 48 personas por prácticas sexuales encubiertas en 14 peluquerías chinas de Barcelona
La Policía y la Guardia Urbana investigan si los negocios estaban gestionados por una red organizada
La Policía Nacional y la Guardia Urbana detuvieron a 48 personas en 14 peluquerías chinas de Barcelona en las que se realizaban prácticas sexuales de forma encubierta y por parte de inmigrantes ilegales. En una gran redada conjunta, se registraron 17 locales de cinco distritos, en 14 de los cuales se hallaron infracciones administrativas -como horarios o falta de licencia-, y se detuvo a 30 personas por inmigración irregular y a 18 por delitos contra los derechos de los trabajadores.
Desde hace algunos meses vecinos de estos locales de los distritos del Eixample, Sants-Montjuïc, Gràcia, Horta-Guinardó y Sant Martí habían hecho llegar a la policía sus sospechas de que en las numerosas peluquerías abiertas últimamente por ciudadanos chinos se hacía «algo más que cortar y teñir el cabello». Algunas de ellas anunciaban en sus puertas que también daban masajes, por lo que tenían cubículos para preservar la privacidad. Pero, según fuentes de la investigación, los masajes podían ir más allá y terminar con felaciones y masturbaciones.
De hecho, en los registros se halló a jóvenes empleadas chinas vestidas únicamente con ropa interior o minifalda y se encontraron preservativos usados. Para estos servicios, acudían a los locales hombres de mediana y avanzada edad y de nacionalidad española, aunque entre los clientes también había mujeres que no sospechaban lo que pasaba en el interior de los locales, muchos de los cuales abrían hasta la madrugada. La Policía intenta determinar ahora si hay una organización criminal que vincule en mayor o menor medida a todos los locales implicados, según aseguraron fuentes de la Generalitat. Por el momento, la operación continúa abierta y no se descarta ninguna línea de investigación.
El alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, afirmó que este tipo de operaciones policiales sirve para evitar el proxenetismo, la explotación laboral y la entrada de inmigrantes irregulares, además de controlar que las licencias de actividad pública se correspondan con lo que realmente se realiza allí. Hereu aseguró que la lucha contra la explotación de personas y el cumplimiento de la legalidad seguirá «en Cataluña, al igual que en toda España», y se aplicará a todos los ciudadanos, «sea cual sea su origen».
Los establecimientos investigados informaban en sus puertas, o a través de enormes carteles, de las ofertas del negocio. Escrito en chino y español, anunciaban lavados, limpiezas de cutis, pedicuras, manicuras, masajes y reflexoterapia, además de «otros servicios». En la imagen, la puerta de una de las peluquerías, en la que se facilita además el teléfono móvil.