El plan de #60 no tiene fallo
Pon una mierda sobre el felpudo, así cuando te lo vaya a robar se manchará las manos de mierda
Luego sólo tienes que buscar al vecino que tenga las manos manchadas
Profit
No es dificil, los roba el chino al que se los compras.
Fuera coñas, compra otro felpudo, le atas un hilo de pesca el hilo lo pasas por debajo de la puerta al otro lado atas lo que sea que haga ruido, y cuando el simpatico venta a robarlo solo tienes que salir y reventarle la cara ademas de recuperar tus felpudos.
Estamos ante un delito continuado de hurto de felpudo....
Solo hay alguien que pueda solucionar esto
a un amigo le estaba pasando lo mismo pero con las baterias del coche. Era un coche antiguo , le forzaban el capo con destornillador y ala. a la 5 vez puso cuchillas de bisturi pegada justo debajo donde tienes que meter la mano para levantarlo. Encontraron sangre y la bateria vivio
Pon minas de super glue en papel de plata debajo del felpudo ya verás que gracia le hace quedarse unido a él eternamente.
#4 Sigue siendo delito (tras la reforma del CP), solo que delito leve. Ahora mismo es tan delito que te roben un bolígrafo de 0,20 céntimos como que te quiten 399 euros de la cartera.
que te roben tres veces el felpudo es que te toman por tonto no, lo siguiente.. me extraña que no sepas quién puede ser, está claro que es personal.
Compra cola blanca, la tipica para manualidades, y unas cuantas bombillas.
Agarra un mortero y pica bien las bombillas, hasta que puedas retirar facilmente las partes metálicas.
Repite hasta que el polvo de los filamentos y los cristales mezclen bien.
Procede a mezclarlo con la cola blanca.
Ahora con cuidado, usa una brocha y hunta bien todo el dorso del felpudo con esta mágica salsa.
Cuando tu "visitante" proceda a agarrarlo, se pringara la mano con algo que pica mil demonios. Los pequeños cristalitos casi invisibles se le clavarán, el polvo del filamento de la bombilla convertirán las pequeñas heridas en focos de dolor y sufrimiento, y la cola blanca asegurará unas 3 o 4 horas de diversión a tu amigo.