Detenido un menor por estrangular a mujer que vivía en casa de su abuelo

La Guardia Civil ha detenido en Las Rozas a un menor de edad, marroquí de 15 años, acusado de acabar con la vida de una mujer de 41 años y nacionalidad española, que era la ex pareja de su abuelo, también marroquí. La mujer fue hallada muerta ayer miércoles por la tarde en la bañera de la casa situada en el 3ºB del número 12 de la Avenida de la Constitución de Las Rozas (Madrid), según fuentes de la Comandancia de Madrid y de Emergencias 112. El cadáver tenía signos de asfixia y un cable enrollado en el cuello, según los investigadores. Hoy jueves está previsto que se le realice la autopsia.

La fallecida es Sonia R. M. En la vivienda la mujer convivía desde hacía tres meses con un hombre de 64 años y los nietos de él, de 15 y 13 años, respectivamente. Supuestamente, ella residía en una habitación de la casa, pero no pagaba ningún alquiler. Varias fuentes aseguran que Sonia tuvo al principio una relación con el inquilino y que en los últimos días habían tenido desavenencias.

Fue el más pequeño de los nietos, quien al regresar a su casa tras salir del colegio encontró a la mujer en la bañera y con signos de asfixia producidos por un cable de una plancha. Se sospecha que la mujer fue atacada cuando se estaba dando un baño debido a que había mucha agua en la bañera. El menor llamó de inmediato al 112. Eran las 14.45 horas del miércoles.

Tras el aviso, se personaron en el lugar sanitarios del Summa-112, que solo pudieron confirmar el fallecimiento de la mujer, que trabajaba como empleada de limpieza en una residencia tras haber estado contratada en un restaurante de la zona. Según han indicado fuentes de Emergencias 112 a Efe, el cuerpo presentaba un estado que hace pensar que la supuesta muerte violenta se produjo varias horas antes de su hallazgo.

El presunto autor de los hechos, el otro nieto de 15 años, salió del domicilio el miércoles con una mochila y fue localizado horas después en las inmediaciones (cerca del Ayuntamiento de Las Rozas) y detenido preventivamente por los agentes de la Guardia Civil, que se ha hecho cargo de las investigaciones de esta muerte violenta. Los agentes que le encontraron observaron que tenía marcas en los brazos, lo que hace suponer que la víctima intentó defenderse del ataque.

Los agentes localizaron al joven con ayuda de la Policía Municipal tras seguir su rastro a través de las imágenes de las cámaras de seguridad del Ayuntamiento, según han indicado a Efe fuentes del Consistorio. Al tratarse de cámaras inteligentes, se utilizó el perfil de ese momento para rastrear coincidencias gracias a su sistema de reconocimiento facial. En el momento de la detención el menor se había desprendido de varios objetos que llevaba en la mochila.

El Ayuntamiento de Las Rozas ha convocado hoy jueves al mediodía un minuto de silencio delante de la plaza consistorial en memoria de la vecina asesinada como consecuencia de este caso de violencia familiar.

El abuelo del detenido explicó en un primer momento a los agentes que Sonia no era su pareja y que ella llevaba conviviendo con ellos en una habitación de la casa, poco después de Navidad. Sin embargo, luego sí admitió más tarde que había tenido relaciones con la mujer y que ella no pagaba ningún tipo de alquiler. El titular del contrato de arrendamiento era el hombre.

Los investigadores manejan dos hipótesis sobre el motivo del crimen: el menor pudo actuar motivado por los celos o intentó agredir sexualmente a la mujer.

Este jueves decenas de medios se han congregado en la puerta del edificio donde ocurrió el crimen. Los vecinos conocían de vista a Sonia y aseguran que trabajaba en labores de limpieza. Una vecina que vive justo al lado del piso de la fallecida explicó que el miércoles por la mañana no oyó nada raro. "Vivo pared con pared y no sentí nada extraño. Me di cuenta de que algo grave había pasado el miércoles por la tarde al ver a tantos guardias". El cuerpo sin vida de Sonia fue trasladado sobre las 22.00 horas del miércoles al Instituto de Medicina Legal de Valdebebas.

El menor detenido es un chico introvertido que no había causado ningún problema en el pueblo. "No se había metido en jaleos o problemas ni tenía ningún problema mental como han dicho por algún sitio", dijo un allegado de la familia del hombre marroquí de 61 años.

• Sonia de 41 años era natural de Benidorm, tenía una hija de nueve años y estaba separada
• El hermano del presunto autor, de 13 años, descubrió el cadáver y llamó al 112
• El padre del chico de 15 años tiene una orden de alejamiento hacia su madre

Sonia Ruiz Miralles tenía 41 años. Estaba separada y era madre de una niña de nueve. Residía en el tercer piso del número 12 de la avenida de la Constitución, en el municipio madrileño de Las Rozas. Este miércoles fue encontrada muerta, dentro de la bañera. Inicialmente parecía que se había suicidado. Estaba llena de agua y tenía el cable de una plancha alrededor del cuello. Natural de Benidorm (Alicante) hacía tres meses que había empezado a convivir con un hombre marroquí de 64 años y sus dos nietos, de 13 y 15.

Fue el menor de los hermanos quien se encontró el cadáver cuando llegó del instituto, a la una de la tarde. Bajó al portal muy afectado. No había nadie más en la vivienda. Tuvo que ser atendido por un equipo de psicológos. Sus padres se separaron y desde entonces permanece bajo el cuidado de su abuelo materno, junto a su hermano de 15 años, que fue detenido seis horas después como presunto autor de este crimen.

Marcela Ribera es la presidenta de la comunidad de propietarios del inmueble. "Ví el despliegue y me quedé impresionada. Los chicos llegaron aquí como en Navidad. Les había visto alguna vez pero ni siquiera sabía que había una mujer en esa casa", apunta. Tuvo que responder a las preguntas de los agentes de seguridad ciudadana. Nunca habían escuchado nada extraño en el domicilio.

Al llegar los sanitarios del Summa 112 solo pudieron certificar que llevaba muerta varias horas, según ha explicado Esther Armela, que estaba de jefa de guardia. Ni siquiera manipularon el cadáver. Agentes de Científica de la Guardia Civil realizaron una inspección ocular en el lugar, llegando a la conclusión de que podría tratarse de un homicidio por ahogamiento. La víctima había sido estrangulada.

Entorno conflictivo

En apenas tres horas, los investigadores llegaron a la conclusión de que el homicidio se había producido entre las ocho de la mañana y la una de la tarde, cuando no había nadie en el piso. Según relató el chico de 13 años, su hermano mantenía una relación conflictiva con Sonia, que tenía una habitación alquilada y trataba de ponerle normas, a lo que él se resistía.

La madre del chico se marchó de la localidad en el año 2010. Su padre tiene antecedentes por tráfico de drogas y violencia de género y un juez dictó una orden de alejamiento hacia la mujer entre los años 2006 y 2008. Su hermano de 13 años es hijo de otro hombre distinto.

Analizadano las imágenes de las cámaras de seguridad, a las siete y media de la tarde pudieron localizar al sospechoso deambulando por las calles de la localidad, tal y como ha explicado el alcalde José de la Uz. Portaba una mochila negra en la espalda con enseres personales y algo de ropa. Pretendía darse a la fuga.Tras ser detenido, el presunto asesino fue trasladado al cuartel y pasó a disposición de la Fiscalía de Menores para tomarle declaración.

Este jueves a mediodía el ayuntamiento ha convocado un minuto de silencio para rechazar este crimen. Mientras han practicado la autopsia al cuerpo de Sonia en el Instituto Anatómico Forense para determinar la causa y la data de su fallecimiento. Sonia era muy conocida en el pueblo. Había trabajado como camarera en el restaurante Antiguo Pozarrón, justo en el centro. También como empleada doméstica y realizando tareas de limpieza en Centro Comercial El Palacio de la localidad de Boadilla.