#1 Me agrada en grado sumo que me realice esta pregunta. No obstante,mi respuesta a tan intrincada cuestión no puede ser expuesta de un modo trivial ante los hastiados ojos de tanto internauta con , digamos, precaria objetividad sobre el asunto. Pongamos que la respuesta fuera "Sí", y de ese modo, al complacerle en su demanda sintiese usted el imperativo afán de proclamarse poco menos que aquél que descubrió la verdad que radica en mi seno. Mas no puedo, no debo, pese a que, créame, me aflige, contestarle con tal simpleza sin pasarme tras ello semanas flagelándome y maldiciendo ese fugaz momento en que opté por la decisión más fácil, más efectiva, sin reparar en las aristas adyacentes a un tema de semejante calado. Por otra parte, si optase por una respuesta más elaborada, tampoco satisfaría seguramente su descabellada curiosidad, pues en el fondo, usted es más feliz desconociendo que conociendo, ignorando que paladeando el saber... en su desidia , usted ha destacado mis carencias de soslayo, y el estruendo arrítmico nunca cesará. Disculpe si hago mutis por el foro, si evado entre bambalinas su mordaz apreciación, pues en el fondo,usted y yo somos conocedores de que nada hay más elocuente que el desdén. En la práctica, muchos se consideran artífices de la prosa, y con sutil vehemencia proclaman sus dires y diretes por popa y proa, como si los receptores de tal compendio , de tal batiburrillo hemorrágico sintáctico, fuese a significar más que un gesto. Imbéciles, se regodean en un fino hielo cubriendo un océano de magma, pero mientras se sostienen son sus acrobacias literarias y pretenciosas, hierve su desdichado fin. Y no dude, señor mío,que la penuria les aguarda y en estos casos,de poco o nada les valdrá su preciosa labia cultivada a cabezazos contra los grandes clásicos del pensamiento. De poco les valdrá aporrear la enciclopedia, o , el colmo, rebuscar en su diccionario de sinónimos de bolsillo, una procaz defincición de la inminente caída al olvido. Usted pretendería conocer mi respuesta, pero me temo que la solución no se puede reducir a una carácteres tan simples como unas letras más o menos bien ordenadas.