#23 Hombre, pues yo soy historiadora, y en concreto medievalista, así que el patrimonio me importa un poquito bastante y soy sensible a su pérdida desde el museo de Brasil de hace poco a la biblioteca de Alejandría, por poner un ejemplo xD.
Por otra parte, la sensibilidad con respecto al patrimonio ha ido aumentando con el paso del tiempo. Hace siglos que se pusieran por encima ocho capas de pintura como creo que pone el artículo, daba igual porque simplemente se repintaba la virgen. Hoy que tenemos otra conciencia evidentemente no da igual, porque intentamos conservar retazos del pasado. Por eso que alguien cubra una talla con titanlux motu proprio, sin tener en cuenta cuestiones tan básicas como el estado del material de trabajo o la iconografía de la época (entre otras mil cosas) es una aberración.
Y en cuanto a las restauraciones, el objetivo de las mismas es arreglar la pieza pero sin añadir absolutamente nada que no tuviera en su contexto original, para que se sepa qué parte es de una época y qué parte es la actual. Por ejemplo, en una vasija de cerámica pintada se puede reconstruir su forma añadiendo cerámica de factura actual, pero esta nunca estará pintada ni se mimetizará con el motivo original. Por eso en el Pórtico de la Gloria al limpiarlo solo se ha conservado solo la policromía que ya había y no se ha repintado entero, porque eso último no sería restaurar. Así que esta señora no ha restaurado nada, ha repintado como le ha salido de los ovarios sin tener en cuenta el contexto de nada y chimpún.
Por otro lado, el valor de la talla no está ligado al nivel cultural del que la hace, ya sea el Papa de Roma o un campesino que come raíces. A nadie se le ocurriría hoy en día ponerle colorines a la Venus de Willendorf aunque la fabricase un humano que se vestía con pieles, hablara a gruñidos, que hacía fuego con palos y que la hizo porque a lo mejor se aburría una tarde en una cueva con algún propósito que desconocemos. Lo importante es el objeto, lo que representa y transmite, no quién lo haya hecho. Así que quizás la talla de la señora indocumentada del XXI, sí representa algo importante en el XXVII y por ello borrar todo vestigio de su época original porque no coincide con los colores primavera/verano de ese año, es otra aberración. No sé si me he explicado/te he entendido xDDD