#154 El problema es que los votantes de Podemos como tu seguro que ven normal que salga un autobús por las calles destinado a amedrentar a periodistas que comprometen a su formación politica debido a las chanchullos y al apoyo exterior que reciben de paises dudosamente democráticos.
amedrentar periodistas, y lo dices hoy que tiene que declarar marhuender xddd y luego en la misma frase formación política jajaja 9/10
Marhuenda, imputado por presunta coacción, intimidación y pertenencia a organización criminal en la Operación Lezo
El juez Velasco le cita junto a Mauricio Casals por sospechar que presionaron a Cristina Cifuentes para que no destapara el caso del Canal de Isabel II
¿Ira Marhuenda al tramabus?
Vaya despolle de día.
El juez cita para hoy mismo a Cifuentes para que declare sobre la corrupción en el Canal de Isabel II
La presidenta de la Comunidad de Madrid tendrá que declarar en la Audiencia Nacional sobre la gestión de su antecesor en el cargo, detenido por la Guardia Civil.
http://www.elespanol.com/espana/tribunales/20170419/209729060_0.html
¿Irá Cifuentes al tramabus?
#186 "para informar a Cifuentes de que el juez la requiere esa misma mañana para declarar en calidad de testigo"
No es tan difícil saber cómo funciona la Justicia ¿no? Al final le vamos a tener que pedir a Zdravo que haga un videotutorial explicándolo.
Que trama ni que trama
La Guardia Civil se incauta de numerosa documentación de una empresa de Florentino Pérez
http://www.publico.es/politica/operacion-lezo-guardia-civil-incauta.html
Pinchazos telefónicos revelan graves coacciones de Marhuenda y el presidente de La Razón a Cifuentes y su equipo
http://www.eldiario.es/politica/Pinchazos-telefonicos-Marhuenda-Razon-Cifuentes_0_634837398.html
Gran agitación en redes sociales. Detractores más que simpatizantes. También declaraciones de los portavoces de partidos políticos. Unanimidad en la condena. Cualquiera diría que se trata de un deshonroso escrache sobre algunos de nuestro prohombres de la política o la economía. O de una acción de desobediencia que acabara con algún herido. O una mamarrachada de porte histórico por parte de los portavoces de Podemos. Pero no, no se trata de nada de eso. Es sólo una acción comunicativa, un gesto “activista”, diseñado según el típico estilo esloganero de Podemos. Pasada la “casta”, llega la “trama”. No tiene por qué ser del gusto de todos. Pero en la agitación que ha provocado se encuentran algunas de las razones de su éxito y de un debate que, de momento, parece mal orientado. Algunas precisiones de partida.
En Madrid se llevan fletando autobuses con fines de agit-prop desde finales de los años noventa. Así lo han hecho algunos grupos ecologistas para denunciar las múltiples tropelías cometidas en este territorio o, en su momento, el movimiento no-global con intención de apuntar sobre las principales instituciones y empresas asociadas al llamado Consenso de Washington. Es una acción, podríamos decir, convencional. Y no es un invento de Hazte Oír, que a su vez ha sabido beber de repertorios políticos de otros movimientos radicalmente contrarios al suyo. Recordemos que la derecha neocontiene en nómina a algunos de los más inteligentes ex extremoizquierdistas del país.
El Tramabús es una acción comunicativa. No agita en los terrenos obviamente más duros de la “protesta callejera” y en los aún más duros de la interrupción de la producción, como en su momento todavía podían hacer ciertos segmentos laborales, simplemente negándose colectivamente a ir a currar. Se puede reprochar a Podemos una evidente incapacidad para superar el “paradigma comunicativo”, que desde un principio se ha autoimpuesto. Pero conviene reconocer que este paradigma fue también el del 15M y el de toda la constelación social del cambio. La cuestión podría ser, más bien, qué acciones pueden acompañar la denuncia simbólica y “comunicativa” con un daño material concreto sobre determinadas posiciones de poder. O dicho en lengua podemita, ¿cómo se arranca a la “trama” conquistas materiales? ¿Cómo se limita su poder y se redistribuye riqueza? La respuesta práctica no está de momento en los archivos de nadie.
El Tramabús es un “gesto activista”, poco más. Obviamente se desmarca de la construcción de “alternativa institucional”, que desde el propio partido muchos reclaman. Contra esta crítica, sin embargo, lo que más sorprende es que Podemos, anquilosado por su peso burocrático y sus continuas luchas internas, sea capaz todavía de expresar algo de imaginación “activista”. Es un gesto saludable, con el que se trata de buscar vías (sin duda desesperadas) para huir de la inercia institucional y parlamentaria. Y efectivamente, con 71 diputados y condenado a ser oposición, el margen de la política centrada en el ámbito institucional es bastante estrecho. Prueba de ello es que el Tramabúshaya provocado el único debate mínimamente relevante que ha habido, dentro y alrededor de Podemos, en los últimos tres meses. Recordemos también que se acaban de aprobar unos Presupuestos Generales.
Hechas estas precisiones, y más allá de las polémicas que tanto apasionan a los expertos del “gusto”, quizás podamos desplazar el debate en otras direcciones. La idea de la “trama” señala de forma inequívocamente confrontativa a la oligarquía política y económica de este país, la misma que en los últimos 80 años ha manejado el Estado (presupuestos y políticas públicas) como su propia empresa. Se podrá decir que esto impide considerar aspectos de orden estructural (UE, globalización, capitalismo financiero, etc.) y que por eso mismo es simplificadora o incluso, si quien habla es un representante de los “partidos de la trama”, demagógica. No obstante, una acción no es un tratado. No nos pongamos pues exquisitos, esto no es lo relevante.
En el giro activista de Podemos hay algo más interesante. Para Iglesias parece claro que limitarse a la acción institucional (“cretinismo parlamentario”, se diría en otro tiempo) es condenar a Podemos a la irrelevancia. Al apuntar al Ibex35, a Felipe González, a las coaliciones oligárquicas en las que ha participado unánimemente la clase política, aparecen los límites de la acción institucional. Y esto mismo es lo que irrita a los “institucionalistas” dentro de Podemos.
De forma obvia, cuando se confronta directamente con la “trama”, se dificultan los pactos con otros partidos, la conquista de nuevas posiciones institucionales e incluso la propia consolidación de los cargos de Podemos como clase política. Pero sobre todo se desvela la enorme fragilidad y falta de empuje de los llamados gobiernos del cambio. ¿O no es la inercia, el continuismo y la falta de voluntad de confrontar con la “trama” la característica más relevante de estos gobiernos? ¿O acaso el Ayuntamiento de Madrid, por ejemplo, ha sido capaz de impulsar la remunicipalización de los servicios de limpieza y tratamiento de residuos gestionados por las grandes constructoras desde hace décadas? ¿O de responder desde la alcaldía a la política de austeridad impuesta por la ley Montoro? ¿O de proponer una política mínimamente ambiciosa de desmantelamiento de los instrumentos de expolio de la “trama”, empezando por dar a conocer los mil y un chanchullos del anterior consistorio?En este mismo sentido también, la acción del Tramabús refleja, a su modo, los límites del paradigma comunicativo en el que se ha movido la “nueva política” desde 2013. Valga decir que si alguno se ha atragantado con las carcajadas al ver, por primera vez, el Tramabús, seguramente no fue porque la acción estuviera mal concebida o porque no haya tenido efectos comunicativos interesantes (como se ha visto, los tiene), sino porque, en el fondo, es inane, impotente; porque no puede ir más allá de la propia autorreferencialidad. De hecho, aunque Podemos supiera mutar virtuosamente y convertir su organización en un particular ejército de guerrilleros de la comunicación, se encontraría con el mismo problema con el que se topan muchos movimientos sociales en toda Europa. La dificultad está en establecer una relación de fuerzas, que no de tuits o de minutos en televisión, capaz de desplazar a los responsables y beneficiarios del expolio público.
En cualquier caso, y como era de prever, sin movimiento y crítica social, la política institucional (ya sea de gobierno o de oposición) tiende a ser engullida por la propia institución. En el Tramabús no se puede encontrar ningún cambio decisivo en la línea de Podemos, tampoco una superación del hecho de que la política hoy es “comunicación política”, pero sí un reconocimiento claro de que o se “mueve ficha” o no hay partido.
Como era esto, si decías verdades biológicas generabas odio, pero si pones caras de presuntos corruptos o periodistas no afines entonces generas amor... ¿?
Hipocresía 100%. Como siempre.
Aguirre admite que su Gobierno pagó sobrecostes por los actos de Gürtel
http://www.eldiario.es/politica/Esperanza-Aguirre-Lopez-Viejo-confianza_0_635186636.html
""""""""""""""""Presuntos"""""""""""""""""""
Hipocresía 100%. Como siempre.
#181
Despues de ver como van saliendo empresarios, politicos, fiscales y periodistas por la palestra de los tribunales, espero que lo de Pais dudosamente democratico lo digas por España.
#193 No generas amor, generas concienciación.
Pero ya sé que a algunos os jode que os recuerden lo que habeis provocado.
#196 Bueno, el PSOE ha provocado lo mismo o más y en cambio es un partido con el que pactar. Así que nuevamente hipocresía.
Aún así, prefiero votar a corruptos, que a amigos de etarras. Allá cada uno con su conciencia, yo al menos no voy de la mano de políticos que se codean de asesinos y miran por su bienestar.
No soy yo quien debería tener remordimiento.
#200 Te lo pongo más fácil, te digo miembros de Podemos que han sido etarras: https://okdiario.com/investigacion/2015/12/26/el-senador-de-podemos-por-guipuzcoa-es-un-miembro-de-eta-arrepentido-44814
Es decir, que los votantes de Podemos han votado etarras. Ahora dime que es peor votar a un corrupto...
#201 Los votantes del PSOE han votado a un partido con un grupo terrorista asociado, y me parece mucho peor que tener a alguien que perteneció a ETA hace 41 años cuando aún no había democracia. Llámame raro si quieres.
Seguimos para trama, le toca a una viejas conocidas:
La Guardia Civil se persona en las sedes de Indra y OHL
- El requerimiento de información se ha llevado a cabo por mandato del juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco
- La constructora OHL emitió entonces un comunicado en el que negó haber efectuado pagos al Partido Popular
1, 2, 3, Venezuela en los medios otra vez.
#201 Hubo una vez que ETA no se dedicaba a poner bombas a diestro y siniestro. De hecho, de los arrepentidos, hay muchos que militaron (y no sabria decir si siguen) en el PSOE. El mismo y otros arrepentidos incluso mediaron o apoyaron en operaciones para la liberacion de presos de ETA (redactado en tu propio link).
Vamos, que ois "ETA" y "PODEMOS" juntos y se os pone como el cerrojo de un penal, mas si es en el titular, pero eso de leer lo llevais chungo. En cuanto terminen de desarmarse no se de que vais a hablar :_)