Titulo original: Una empresa ‘antiokupa’ intenta echar de un piso de Reus a una familia de alquiler legal
Una familia de Reus, con dos menores de edad de 5 y 6 años, fueron amenazados por cinco personas que pertenecerían a una empresa de «desokupación» con sede social en Alicante. Los cinco integrantes de esta firma, cuatro hombres y una mujer, llegaron poco después de las 7 de la mañana a una vivienda de la calle Gornals, en el centro de la ciudad, y aporrearon la puerta mientras intentaban sacar el bombín.
La familia, sobresaltada, cerró con llave y avisó a los Mossos pensándose que era un robo. Sin embargo vieron rápidamente que se trataba de una empresa de «desokupación», que sin contemplaciones pedía a la familia que saliera por su propio pie o los echaría de malas maneras.
La familia se pertrechó en su piso atemorizada e intentó hacer oídos sordos de los gritos que llegaban desde la calle y del rellano, algunos desagradables. Los dos pequeños de la casa lloraban desconsoladamente y temían que esos hombres hicieran daño a su padre, han explicado fuentes conocedoras del conflicto.
Poco antes de las 9 horas, Mossos hacía acto de presencia en la calle Gornals. Hablaba con los componentes de esta empresa y también con el padre de familia que tiene el alquiler del piso desde agosto de 2020. La documentación que enseñó a los agentes acreditaba que no estaba de okupa y que las intenciones de esa empresa carecían de fundamento legal.
Mossos logró que la tensión se rebajara y durante un rato, los cinco integrantes se dispersaron pero sin dejar de vigilar el piso desde otros puntos de la calle. Cuando la situación parecía calmada, los coches patrulla se marcharon.
Sin embargo, la ‘pesadilla’ continuó durante toda la mañana. Incluso en la denuncia policial se relata la presencia de un arma de fuego escondida en la cintura de uno de los integrantes de esta firma, que se mostró a la familia para que vieran que no tenían intención de rendirse sin lograr que la familia se marchara. De momento, la familia ha podido quedarse en el piso y ha pedido una orden de alejamiento.
El origen de los hechos viene de una disputa familiar entre dos hermanos, titulares a partes iguales del piso por herencia. Uno de los copropietarios puso la vivienda en alquiler y ésta la gestiona una inmobiliaria, que ayer informaba al Diari que también denunciará los hechos sufridos por los inquilinos. El otro hermano habría contratado a la empresa para ‘echar a la familia’.
Los inquilinos entraron en el piso en agosto de 2020 y están al corriente de pago y documentos en regla. Admiten que un hecho similar lo vivieron en septiembre de 2020. Entonces incluso les cambiaron el bombín y se llevaron muebles sin permiso. Los tribunales les devolvieron su ‘casa’, cuyo contrato vence en 2025.
Fuente: diariodetarragona.com
Teniendo en cuenta cómo estamos con manipulación mediática y mentiras recientes, la parte de la pistola es casi ignorable. También habrá que ver cómo de legal es hacer un contrato cuando sólo tienes el 50% de la propiedad a tu nombre.
Parece que el tema de las empresas de "desocupación" se está volviendo en una forma simple y común de conseguir sicarios para hacer cumplir tu voluntad.
¿Qué creéis que pasará en el futuro? ¿Seguirán habiendo casos como este o el de la abuelita que subalquila la casa? ¿Es justo que empresas de matones se tomen la justicia por su cuenta ya que la misma es lenta? ¿Dónde estará el límite?