Soy Felipista a morir, muy por encima de sentimientos monarquicos y demás barrabasadas, cualquiera que le haya seguido un poco sabrá que cada centimo invertido en él no ha sido malgastado.
Podemos ponernos en la tesitura de que es un cargo que no le corresponde o que no es nada democrático, respeto y es legítimo pensar asi pero desde luego si fuera un tirano, ojalá todos los tiranos trabajaran la décima parte de duro que lo hace este hombre.
A esta persona le han dado unos medios a su alcance y los ha explotado al límite.
Dicho todo esto, creo que a otros le hubiera bastado con seguir el protocolo en el caso de que alguien le negara el saludo. El insiste y le vuelve a tender la mano, unos creeran que es populismo otros pensamos que es innato en su caracter.
Podemos tirarnos horas discutiendo en si es una falta de respeto o no lo que ha hecho el empresario, es indiferente cada palo que aguante su vela y que se sienta orgulloso de sus acciones. Que este hombre esté ahi trabajando por acercar posturas entre empresarios catalanes y madrileños creo que deja en evidencia la clase de lider que es.