Todo comenzó en un programa llamado "De costa a costa" Un programa de radio en donde se habla sobre fenómenos paranormales, donde la gente llama para contar sus experiencias, pero hubo una que dejó gran marca en el programa y que se hizo a tardes de horas de la noche, cerca de la madrugada.
La radio recibió una llamada de un hombre que se hacía llamar Mel Waters, que por la
voz, parecía tener entre 50 y 60 años, el hombre no dio su ubicación exacta en ningún momento, era cauteloso pero se identificó como el dueño de una propiedad de varias hectáreas en Ellensburg, Washington, una área rural.
El señor afirmó que un día mientras se encontraba caminando por su propiedad cuando encontró un hueco en el suelo de 3 metros de radio, algo que realmente llamó su atención.
Mel y el hoyo
Cuando Mel se asomó, el hueco solo mostraba un fondo negro, lo primero que se le ocurrió fue lanzar una pequeña piedra, de esta manera mediría la profundidad del pozo, pero en ningún momento escuchó que la piedra golpeara con el fondo del hoyo, decidido a descubrir la profundidad del hoyo, tomó una piedra gigante para arrojarla pero cuando la aventó, nuevamente no escuchó el golpear de la piedra al tocar fondo.
El primer experimento
En ese momento de la llamada, Mel le confesó al locutor que esa noche no pudo dormir bien y que al día siguiente regresó al hoyo en su camioneta para seguir averiguando su profundidad, después de meditar algunos minutos, subió a su camioneta y se dirigió a la ferretería del pueblo, compró todos los metros de soga que tenían en la ferretería y los amarró a una estaca, aventó más de 20 metros de cuerda enrollada y aquí comenzó la pesadilla de Mel, pues se dio cuenta que la cuerda seguía tensionada, ese hoyo tenía más de 20 metros de profundidad.
La gente comenzó a hablar
Mel comenzó a contar la historia del hoyo por el pueblo y se dio cuenta que muchas personas más viejas que él conocían el hoyo, le dijeron algunos que la gente utilizaba el hoyo para deshacerse de las cosas que ya no querían, llantas viejas, electrodomésticos, partes de autos y demás cosas, pues era más barato deshacerse de ellas tirándolas por el hoyo que llevándolas a reciclar. Mel no se molesto con lo que le dijeron, al contrario, se sintió asombrado con lo que le contaron, nadie compartía la misma emoción de Mel por descubrir la profundidad del pozo y lejos de molestarse porque la gente traspasaba su propiedad para tirarle basura, el preguntaba a todos quienes habían dicho que tiraron algo una pregunta realmente alarmante: "¿Has escuchado que algo de lo que avientas toca fondo?" y todas las personas respondían lo mismo: "No".
La oveja
Mel comenzó a buscar personas que sintieran curiosidad para así poder descubrir la profundidad del pozo y fue así como con un grupo de pobladores, lograron conseguir la mayor cantidad de cuerda posible, entre todos juntaron 457 metros, arrojaron la cuerda con un objeto amarrado para saber cuando llegara al final, pero se llevaron una gran sorpresa cuando el objeto nuevamente no tocó fondo. Decidieron hacer un experimento diferente, tomaron una oveja y decidieron amarrarla para ver que pasaba, Mel afirma que siempre se arrepintió de haber hecho eso, pues cuando bajaban al animal sintieron un tirón muy fuerte, seguido de unas vibraciones que podrían sentirse en la cuerda.
Lo que apareció
Cuando lograron sacar a la oveja, se llevaron la peor sorpresa de su vida al ver que la oveja estaba completamente despedazada como si un animal grande y muy fuerte la hubiera comido por partes, pero no era lo peor sino que dice que la oveja parecía tener algo en su interior, como un animal que estaba creciendo o desarrollándose dentro de su cuerpo. Ante el asombro, las personas y Mel dejaron caer a la oveja en el hoyo donde solo lograron escuchar unos pequeños gritos.
El intento más grande
Pero aún con el gran susto que se habían llevado, Mel no decidió dar marcha atrás en sus experimentos y por eso compró a una compañía pesquera, 24387 metros de cuerda para pescar, sus amigos lo ayudaron nuevamente y arrojaron la soga por el hoyo, duro horas cayendo y al final del día, no tocó fondo. El tema comenzó a hablarse en todo el pueblo, comenzaron a esparcirse rumores y la gente comenzaba a asustarse un poco cuando hablaban de que el hoyo nunca fue hecho por nadie, desde la creación del pueblo había estado ahí.
La gente hablaba
Mel le comentó al locutor que haber esparcido la noticia había sido uno de sus peores errores, pues una noche, tocaron a su puerta, cuando abrió, se dio cuenta que eran varios vehículos del gobierno, comenzaron a hacerle preguntas muy extrañas como si había escuchado voces saliendo del hoyo o si había tenido algunas pesadillas recurrentes sobre el hoyo, lejos de tranquilizarlo lo único que provocaron fue que Mel sintiera más terror y se cuestionara más cosas sobre el hoyo ¿Por qué el gobierno estaba en su propiedad y le hacía esas preguntas?
El gobierno lo ocultó todo
Después de eso, las personas del gobierno le dijeron que querían comprar su propiedad, le ofrecieron una suma de dinero bastante grande y cansado del enigma, Mel Waters vendió la propiedad y lo hicieron irse del estado, el hombre dijo que lo habían estado siguiendo y que lo intimidaban mucho, razón por la que decidió irse a vivir a Australia para que dejaran de molestarlo, y aunque siempre piensa en lo que había dentro de ese hoyo ahora se siente más tranquilo pues es problema del gobierno.