Para nutrir la hucha de las pensiones.
La subida se aplicaría desde 2023 y hasta 2032, según la última propuesta de José Luis Escrivá
Nueva vuelta de tuerca al plan del Gobierno para pagar las pensiones de la generación del baby boom. El Ejecutivo ha elevado una décima más, hasta los 0,6 puntos, la propuesta de cotización adicional a la Seguridad Social que deberán abonar durante diez años empresas y trabajadores. Según el último borrador, los primeros pagarían 0,4 puntos y los segundos 0,2 puntos. El objetivo de la medida es intentar equilibrar las cuentas del sistema de cara a los años en los que soportará una mayor presión por la jubilación de los baby boomers.
Según explicaron CCOO y UGT, esta ha sido la propuesta que ha llevado esta mañana el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, que dirige el ministro José Luis Escrivá, a la mesa con patronal y sindicatos en la que negocian algunas de las medidas que quedaban pendientes de la reforma de pensiones que se tramita en las Cortes.
Fuentes del Ministerio de Inclusión, por su parte, aseguraron que esta ha sido "una reunión muy productiva", en la que han presentado "pequeñas modificaciones sobre la propuesta de la semana pasada sobre el mecanismo de equidad intergeneracional (MEI)", entre las que se incluyen una subida de 0,6 puntos y el reparto de la misma entre empresa y trabajador. "Se están realizando avances y las conversaciones continuarán los próximos días", han añadido desde Inclusión.
La propuesta supone elevar el esfuerzo extra que el Gobierno quiere exigir a trabajadores y empresas para sostener el sistema de pensiones. Hace apenas una semana, el Ministerio de Escrivá planteó un incremento temporal del 0,5 puntos en las cotizaciones a la Seguridad Social que pagan trabajadores y empresas, que se abonaría al menos hasta 2030. Según los cálculos expresados entonces, el objetivo era recaudar unos 1.000 millones de euros extra al año.
Con esos fondos, precisaron fuentes cercanas al departamento de Escrivá, se busca 'engordar' el Fondo de Reserva, de forma que pueda ser empleado a partir de 2030 en caso de que haya una "desviación de gasto" respecto a las previsiones. El Gobierno tiene marcada esa década porque es entonces cuando el sistema "podría verse más tensionado", pues es entonces cuando se producirá la jubilación de la generación del 'baby boom'.
La subida inicialmente planteada suponía unos 60 euros al año para un trabajador mileurista. Con el planteamiento de este lunes, el incremento sería ya de unos 72 euros al año. Fuentes cercanas al Ministerio de Escrivá sostuvieron la pasada semana que se trata de "una cantidad muy reducida".
A partir de 2032, esta ratio se revisará cada tres años
A pagar, que los Baby boomers se jubilan y hay que darles su paguita.