Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, que había ido mano a mano con Conte hacía solo unos días, pasaba a un perfil más bajo. El MEDE puede servir en el corto plazo, pero hace falta pensar en el medio, algo en lo que ha reincidido este martes Calviño antes del Eurogrupo. Estas medidas pueden ser puestas en marcha, pero hay que seguir pensando en el largo plazo. Conte, por su lado, en una declaración realizada este lunes, endurecía la posición italiana: “No al MEDE”.
Nadia Calviño, vicepresidenta económica del Gobierno, ha confirmado horas antes del Eurogrupo que España apostaría por la versión pragmática del sur. Sí al paquete que hay sobre la mesa, pero quieren que se siga trabajando y en concreto desean que se refleje la idea francesa de un fondo de reconstrucción que marque el camino para seguir trabajando. Esa posición de Calviño sigue la línea marcada hace unos días por Mário Centeno, presidente del grupo, que señaló que el debate de los coronabonos no debía tomar como rehén el paquete que los ministros tienen ahora delante.
Pero Italia siente que es ahora o nunca, y que una vez el paquete esté aprobado va a ser más difícil alejar a Alemania o Países Bajos de su rechazo a medidas más ambiciosas. Por eso, tanto Conte como Gualtieri están dispuestos a llegar hasta el final. Hasta hace poco, contaban con el apoyo español y francés, pero París y Madrid han ido girando hacia posturas más pragmáticas, con un plan galo para crear un fondo de recuperación económica, que podría financiarse con una única emisión de coronabonos y que podría estar en el entorno del 2% o 3% del PIB europeo. Roma también apoya esa idea, pero quiere que todo quede mucho más atado.
España llega a la reunión con una postura mucho más abierta, con un perfil muy bajo. Calviño ha estado activa pero sin hacerse notar, mientras Francia e Italia han estado en la primera línea. Al encuentro llega sin muchas ideas preconcebidas, sin números concretos y sin un esquema mental fijo sobre cómo se debe articular el día después de que se frene la pandemia.
Solo unos minutos antes de que comenzara el Eurogrupo, Madrid ha hecho circular un papel en el que hace referencia a un plan similar al propuesto por el ministro galo Bruno Le Maire para la creación de un fondo de rescate europeo.
Las medidas que hay sobre la mesa recibirán el apoyo del Gobierno, pero “no son suficientes”, por lo que insisten en la receta de la emisión de deuda conjunta: “La etiqueta no es lo importante, que sean eurobonos o coronabonos, eso es secundario, lo importante es que estemos unidos en los mercados para recuperarnos sin que aumenten las divergencias”.