A mí me parece muy bien que se done dinero a Haití para que puedan salir más fácilmente de la miseria en la que se encuentran actualmente. El problema llega cuando esas importantes cifras económicas se las conceden a los gobiernos de regímenes dictatoriales, los cuales (en su mayoría) utilizarán el dinero para su beneficio individual, y no para el del respectivo país.
Si no me equivoco, el presidente haitiano ya había recibido capital por parte de varios países occidentales. ¿Qué hizo con todo él? Gastarlo en Estados Unidos, concretamente en la ciudad del juego.