Holanda va a implantar un nuevo modelo para gravar las emisiones de los coches: controlar los kilómetros que recorren y a qué hora. De esta manera, a partir de 2012, el que más contamine, más pagará. La medida afectará a unos nueve millones de coches y a 60.000 camiones. Según las autoridades, las nuevas tasas no sólo reducirán en un 10% las emisiones de CO2. Al haber menos autos en carreteras y autopistas, los accidentes bajarán un 7%. Y los atascos -las temidas colas que para 2020 originarán ya 1.700 millones de euros anuales en pérdidas- bajarán a la mitad.
Tan ambicioso plan será posible con ayuda de un sistema de navegación vía satélite instalado en cada vehículo. La idea es cobrar un mínimo de 3 céntimos de euro por kilómetro recorrido, que podrá tener recargos -aún sin decidir- en función del momento (no será lo mismo en hora punta que en otro periodo). Hacia 2018, se espera que estas tasas sumen unos 7 céntimos de euro. Tanto el transporte público, como las motocicletas y los coches de minusválidos estarán exentos del pago. No así los camiones con matrícula extranjera. Si las visitas son esporádicas, pagarán al abandonar el territorio.
Ya sea por seguridad por ecologismo o lo que se al final vamos a perder toda nuestra privacidad a manos del estado, impresionante