A mi hermana -aunque más bien debería decir, a sus 16 años- le hacía ilusión el comprar unas gafas personalizadas Knockaround que tan de moda están, de modo que entramos en la web española y vimos los modelos disponibles.
Para variar, siempre que algo triunfa en EE.UU, tenemos en unos meses al "negociante españolito" de turno reseller quien pide un contenedor entero pensando que se va a forrar en dos días. Como estas cosas me sacan de quicio, sobre todo cuando veo que la web española no dispone de gafas custom, y que la mayoría de su stock está "out of stock", entramos en la web norteamericana, configuramos las gafitas de la niña y las compramos.
Como vivimos en una ciudad capital, no tardan en llegar por correos (5 días) las susodichas gafas, muy monas ellas, en su fundita de tela azul, con la pegatina y la etiqueta de "original product", en fin, la mariconadita de cualquier pijiartículo. Mi hermana comienza a utilizar las gafas y, como es habitual en su caso y en el de las mejores familias -y algo menos en las peores- al cabo de dos días se cansa de ellas, ya que tiene unas rayban silver chrome (desde que era niña, reniña, 110 euros, pero de lo mejor que he visto en mi vida).
Sin embargo, un día entre semana decide coger las gafas Knockaround, ya que se va a la "playita" y como todas las nenas de su edad tienen unas iguales, ella quiere lucirlas. Cosas de la edad comprensibles, nos pasa a los mayores con los coches caros (si no tienes uno, imagino que te puede pasar con ser el mejor en el cod). Esta sería entonces la tercera vez que las viste. A mitad de camino a la playa (hay 5 minutos caminando) me llama por el móvil y me dice que se le han roto mientras las llevaba puestas (facepalm).
Alucino, y después de una jornada de playa vuelve a casa y me las enseña. Las gafas se han roto por la montura por el lado de la nariz, abiertas, un corte limpio, sin duda, pero como si el cristal (cristal, qué risa, más bien "plasticucho") de la lente hiciese demasiada torsión y este hubiese forzado la montura a romperse.
Tras esto, contactamos con la web americana, y el SAC decide enviarnos un nuevo par de gafas custom nuevamente, sin coste alguno y pudiéndonos quedar con el anterior. Nos llegaron hace cosa de dos días, pues bien, hoy, caminando por la calle, se vuelven a romper delante de mi, por el mismo sitio pero por el lado contrario, wtf?
Lo mejor de todo es que entro en internet en foros y todo el mundo dice lo mismo, que son un puto plástico, que son malísimas, que más gente debería saberlo para no comprarlas.
Pues nada hombre, dejo mi granito de arena, que hay que mover el comercio en este país: al menos, desde mi experiencia puedo decir que las gafas Knockaround son una basura de pésima calidad.
PD: Y este domingo, en cierto periódico, venden una réplica por 2,5 euros que seguro que dura más, frente a los 18 dólares que pagamos por ellas xDDDDD