En el reino animal el envejecimiento desde el punto de vista estético no es nada comparable al de nosotros. Animales que pueden vivir la misma cantidad de años que nosotros o más apenas presentan cambios estéticos más allá de una atenuación de pigmento o brillo en su pelaje, piel, escamas o lo que pertine. Y obviamente una disminución de rendimiento físico y resistencia.
Sin embargo por nuestra parte nuestro cabello cambia completamente, nuestros ojos se arrugan y pierden intensidad, la piel de la cara se cae, nuestro tono de piel cambia notoriamente, la voz... diantres nadie reconocería a una persona de 85 años a sus 25 si estuvieran lado a lado y no obstante a un perro con 1 año y con 16 su figura estética prácticamente intacta.
Esto no hace mas que alimentar la teoria de que no somos de este planeta y nuestro genoma se configuró desde Marte.