Bon Jovi asistía como invitado a una boda en Miami el pasado fin de semana cuando la cantante encargada de amenizar la celebración empezó a cantar Livin’ on a prayer invitándolo a unirse a ella.
La risa forzada y la cara de circunstancia del artista era todo un poema, aunque finalmente cogió el micrófono y les regalo la canción a los novios.
No llega ya xD