Un joven de 23 años murió el pasado mes de junio en el parque de Yellowstone, al noroeste de EE.UU., cuando paseaba por la cuenca de géiseres de Norris. La investigación se ha hecho pública ahora, y confirma que Colin Nathaniel Scott, natural del Portland, se disolvió al caer en el agua hirviendo y ácida, cuando trataba de mojarse un poco.
Tal como informa «Time», el informe confirma que Colin Scott buscaba un lugar para mojarse —una práctica prohibida por el parque— en compañía de su hermana. «Se estaba acercando para comprobar la temperatura de una fuente caliente cuando se deslizó y cayó en el agua», dice el informe, citando a su hermana, Sable Scott.
Los equipos de rescate que buscaban al joven encontraron su cuerpo en el agua, junto a su cartera y sandalias. Sin embargo, una tormenta eléctrica les impidió sacar el cuerpo, y cuando volvieron al día siguiente a intentarlo de nuevo este ya se había disuelto.
No es la primera ocasión en la que una persona muere en estas circunstancias. Desde 1870, 19 personas perdieron la vida en incidentes similares en esta reserva natural.
Pues que muerte más chunga tuvo que ser, asado y quemado a la vez, joder. Por tonto, se quería mojar un poco xDDDD