Costa alicantina. Lo mas cerca del infierno.
Un puñetazo en la nuca le metía a la gente que dice "que buen tiempo hace" y el termómetro marcando 35°.
Lo jodido es que se agoten los ventiladores en toda la ciudad, verídico, nos tuvimos que ir a Amsterdam a por uno.
Ya me tienen calao y pasan de mí, la última vez les dejé tirados y con la palabra en la boca y me metí en el hotel