Debo caer mal a alguien en jefatura, porque me han caído todos los elementos del instituto, pero bueno, eso es otro tema.
Me centraré sólo en uno. Vendría a ser lo peor que os podéis imaginar. Prácticamente psicótico, va a clase puesto de todo, cuando se le ordena algo pilla cabreos de impresión y se lía a golpear mesas con fuerza o a tirar mochilas por la ventana. Muchas veces va hablando solo, es común que se propase con sus compañeras (de momento sólo tocamientos, pero en mi opinión es un violador en potencia) y la guardia civil ya se lo conoce como si fuera de la familia.
Los de orientación no quieren saber nada porque hacer un estudio psicológico para enviarlo a un centro de educación especial vendría a ser algo así como... trabajar. "¿Y encima con ese chaval? ¡Venga, hombre, yo he aprobado las oposiciones para tocarme los cojonazos!" parece ser la filosofía de ese departamento.
Al chaval hasta lo han detenido vendiendo droga, pero gracias a la ley del menor ni siquiera pisa un centro de menores. Los servicios sociales le dicen al padre "tenga cuidadito, hombre" mientras le dan una palmadita en la espalda y le dicen al chico que no lo vuelva a hacer. Si lo vas a echar de clase simplemente no obedece. Si lo haces a la fuerza, como mínimo ya tienes a los inútiles de sus padres encima hablando de maltrato (ya le pasó a otro profesor el año pasado). Su hijo vende droga a menores y ellos vienen a quejarse de un apretón en un brazo. El no va más.
Y lo peor de todo, ya te puede ir por la tercera puñalada en tus riñones que como es menor, si te defiendes, acabas en el calabozo y él, al día siguiente, otra vez a clase a hacer la vida de los demás tan improductiva como la suya propia.
Simplemente un lloro, porque no veo demasiada solución.
PD: Sí, hundirlo a partes hasta que quede expulsado y que el seguro afronte mi coche quemado.
PD2: Sí, el año pasado quemó un coche del profesorado y aquí sigue.