Fue el rumor que dominó la tarde, que Microsoft estaría por comprar Skype, que Steve Ballmer se encontraría en pláticas con la empresa de la tecnología de VoIP más exitosa —y P2P también—, que serían casi 8.000 millones de dólares los que la empresa de Bill Gates invertiría… Y así hasta que Kara Swisher de All Things Digital convirtió todas las especulaciones en certeza: Microsoft anunciará en las próximas horas la compra de Skype.
Microsoft, en su intento por entrar al juego de las comunicaciones en Internet dominado por Google y Facebook —que también pujaron por Skype— ha tomado por sopresa a más de uno y sacó de la billetera unos 8.500 millones de dólares. Puesto así, la compra de Skype representa una adquisición mayúscula que bien conducida le brindará a Microsoft más oportunidades de expandir su negocio en la red, dirigido tanto a usuarios finales como corporativos.
Por supuesto, quedan varias preguntas en el aire.
¿Qué hará Microsoft con Skype y Nokia juntos? No me lo puedo imaginar, pero hay quien dice que es la pricipal razón de la compra y parte de un plan macabro maestro de Microsoft para impulsar Windows Phone 7.
¿Skype seguirá ofrenciendo versiones para Linux —aunque sea mediocres como sucede ahora—? Es difícil saberlo; personalmente tengo mis dudas.
¿Skype estará integrado en Messenger, Office, Azure y demás aplicaciones/servicios de Microsoft? Nunca se sabe…
Y la pregunta que todos nos hacemos, ¿Skype seguirá llamándose así? Si tomamos en cuenta sus casi 700 millones de usuarios registrados, creo que debe ser así por respeto a todos ellos. Aunque en la red ya le llaman Skyprosoft