Historicamente, el germen de una Europa Unida es el Sacro Imperio. Luego, tras la Segunda Guerra Mundial y como ya venía intentándose -más mal que bien- desde el final de la Primera, su principal motivo fue acabar con las constantes luchas entre Alemania -o sus anteriores formas- y Francia, y de paso unificar la zona con la adhesión de países.
Curiosamente esto ha originado el declive europeo, y ya vemos dónde estamos ahora. ¿Dónde? pues mirando cómo vivimos de ser un organismo burocrático que ha perdido peso específico en el mundo, tanto en lo político, como en lo económico.. y pretendemos aún que nuestros valores sigan siendo los que rijan el mundo del futuro. Y mientras vemos cómo alrededor nos crecen los gigantes, nos contentamos con ser los buenos.
El intento de homogeneizar la sociedad europea, históricamente plural y rica, la ha empobrecido considerablemente.
Respecto a lo que dices Trichet, sólo es el siguiente paso. Una moneda única no tiene mucho sentido sin una política económica y en concreto fiscal unificada. Y no soy partidario ni de una ni de otra, pero que el sistema actual es un error se comprende atendiendo a la actual coyuntura.
Europa, como organismo burocrático, cada vez busca más poder, cada vez menos democrático -Tratado de Lisboa-, y se hace comulgar a los ciudadanos con ruedas de molino -pluralidad, multiculturalidad- que en vez de enriquecer, viendo los hechos, sólo les empobrece.