Pues yo mira que prefiero a los tíos de ciudad. Cada año para las fiestas algún primo de ciudad de alguien se lleva un palizón como un demonio y se va pa los Madriles suavecito de por vida.
El año pasado se casó un amigo en fiestas y cuando volvió de Cancún lo primero que preguntó es quien había cobrado este año y quien había sido el que le había dado la sesión de fisio.