Acabo de ver el video de yonkis.com del chaval al que sus padres le regalan lo que parece ser una Xbox360 y cuando abre la caja, es para darse cuenta de que realmente es ropa. Mientras escuchaba las risas de los malvados padres de fondo, me ha venido a la cabeza esta imagen:
A la tierna edad de 7 u 8 años, mis padres decidieron tomarse vacaciones por primera vez desde que mis dos hermanas y yo empezamos a llegar al mundo. Ser padre es jodido.
Como quiera que nosotros aún teniamos clases y mi hermana mayor ya tenia 11 años y no podia permitirse saltarse dos semanas de clases, nuestros padres nos dejaron a ella y a mi con un matrimonio mas joven, amigos suyo y que no tenian aún hijos. Antes de marcharse, mi madre, a la que le pesaba mucho dejarnos durante 2 semanas, nos preguntó que queriamos que nos trajeran a la vuelta. Yo, que por aquel entonces empezaba a ir a jugar a casa de los colegas, veia con envidia los ordenadores de algunos de estos; Commodores64, PC, Spectrums...Asi que en mi inocencia infantil, le dije que un ordenador. Para mi era un souvenir como otro cualquiera. Con la diferencia de que yo queria y necesitaba un ordenador y no queria ni necesitaba una camiseta de "Recuerdo de Granada".
Las dos semanas pasaron y mis padres volvieron. Despues de los pertinentes besos y abrazos, mis primeras palabras no se hicieron esperar "me habeis traido el ordenador?" y la respuesta esperanzadora de mi madre "Si, pero está en la maleta, cuando lleguemos a casa te lo doy". Los 10 minutos desde ese momento hasta la llegada a casa se me hicieron eternos. Y cuando por fin llegamos a casa y sacamos las maletas volví a preguntar timidamente "...el ordenador?". A destacar que mis padres volvieron con las mismas maletas con las que se habian marchado y que era de esperar que no hubieran tirado ropa para colocar mi ordenador en su lugar, asi que era imposible que alli hubiera un ordenador. Pero la emoción me cegaba por completo y cuando me dieron la Game&Watch de Nintendo del Donkey Kong mi primera reacción fué decir "vale, muy bonita, pero y el ordenador?". Pero al alzar la vista y ver la cara de ilusión con que mi madre me la entregaba, comprendí que no habia tal ordenador. Que mis padres, en su eterna ignorancia de todo lo que tenga teclas, habian confundido una handheld con un ordenador. No dije nunca nada más sobre el asunto. Lo zanjé con un "gracias".
Con el tiempo disfruté mucho de la maquinita e incluso tuve ocasión de presumir de ella. Por aquel entonces las handheld aún tenian éxito. Faltaban muchos años para que apareciera la GameBoy.
Unos cuatro años despues de aquel incidente de la maquinita del puto mono, mis padres por fin me compraron el ordenador como premio por haber ganado las 3 medallas de oro en las 3 pruebas de atletismo que solia practicar anualmente y que ese año, por motivos de una lesion, parecian peligrar. Al principio fué un PC que nunca llegó a funcionar no se sabe aún bien porque, lo cambiamos por un Amstrad CPC que se jodió inexplicablemente a las pocas semanas y terminó convirtiendose en un MSX que aún conservo en algún cajón del armario del garaje que hay en mi antigua casa.
Y vuestros padres, han minado alguna vez vuestras ilusiones infantiles? xD