Primero hay que saber interpretar los datos y saber diferenciar entre eficiencia y efectividad (y saber lo que significa), podéis buscar dichos datos sobre la gripe (influenza), donde se habla de evitar hospitalizados y no sobre no contagiarse de ella. Por ejemplo, en una búsqueda rápida, en datos de hace en torno a 12/8 años se puede leer perfectamente:
Un metaanálisis de datos de cinco temporadas (2010-2014) calculó una efectividad de las vacunas del 41 % (CI del 95 %, 34-48) para prevenir las hospitalizaciones por influenza en adultos de 18 años de edad o más y una efectividad de las vacunas del 51 % (CI del 95 %, 44-58) en adultos de 18-64 años.
Luego hay que tener en cuenta que esos números con la vacuna covid fueron mucho mejores en los ensayos, y que hay vacunas con a penas un 15% de eficacia las cuales aprueban.
Por otra parte, como comenta @LimPollbrow, hubo una cantidad de desinformación brutal, de hecho a las personas que no eran de riesgo y no querían vacunarse se las trataba poco menos que de terroristas, alegando que tenían más carga vírica y podían contagiar a sus abuelos, cuando lo importante era que los abuelos se vacunasen, porque quien haya estudiado un poco sobre contaminación cruzada se da cuenta que lo de llevar mascarilla en el super o transporte público y tocar lo mismo que tocan otras personas, te expone al virus igualmente por mucha mascarilla que lleves.
Luego nos vendieron la moto de la eficiencia de 6 meses en la vacuna, independientemente de que el virus mute y no sea estacional, te vacunas para 6 meses y luego te quedas igual de expuesto. Pero han pasado más de 6 meses, la gente ha sudado de la 4a dosis y el mundo no ha empeorado ni el virus se ha ido. Una pregunta que está en el aire y prácticamente nadie se hace.