En la grabación, los agentes le piden a la mujer mostrar algún documento que la identifique como fémina, de lo contrario, deberá salir del baño. “Soy una maldita mujer“, responde muy enfadada la chica.
Tras la contestación, uno de los oficiales se encara con ella y la obliga a salir del servicio a empujones. Mientras, la persona que graba la indignante escena solo alcanza a pronunciar “esto es tan triste, ella es una chica“.
Por último, en otras informaciones se indica que fue otra mujer la que llamó a la policía advirtiendo de que había un hombre dentro de los aseos. Un error de bulto ya que se trataba de un joven lesbiana con vestuario de corte masculino.
PD: Para mi los policías actuaron de manera correcta pese a que todo fue una leve confusión, un trabajo policial impecable.