"La devoción de un padre por su hijo puede ser en ocasiones la fuerza más poderosa de la naturaleza."
Este es el caso de Yu Xukang, que vive en China y cada día recorre los 29, 2 km que hay entre la escuela de su hijo y su casa para que éste pueda educarse y llegar a ir un día a la universidad.
Xiao Qiang tiene 12 años y sufre malformaciones en sus brazos y piernas, que le impide andar o montar en bici, pero pese a todo, su padre no está decidido a que esto impida a su hijo triunfar en la vida y está más que orgulloso de que sea el primero en su clase.