Como parte de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, la Guardia Civil tiene la misión de proteger el libre ejercicio de los derechos y libertades y garantizar la seguridad ciudadana. y la ejerce mediante el desempeño de las siguientes funciones:
* Velar por el cumplimiento de las Leyes y disposiciones generales ejecutando las órdenes que reciba de las autoridades competentes, en el ámbito de su competencia.
* Auxiliar y proteger a las personas y asegurar la conservación y custodia de los bienes que se encuentren en situación de peligro por cualquier causa.
* Vigilar y proteger los edificios e instalaciones públicas que lo requieran.
* Velar por la protección y seguridad de altas personalidades.
* Mantener y restablecer, en su caso, el orden y la seguridad ciudadana.
* Prevenir la comisión de actos delictivos.
* Investigar los delitos para descubrir y detener a los presuntos culpables, elaborando los informes técnicos y periciales necesarios.
* Captar, recibir y analizar cuantos datos tengan interés para el orden y la seguridad ciudadana.
* Colaborar con los Servicios de Protección Civil en los casos de grave riesgo, catástrofe o calamidad pública.
De acuerdo con lo dispuesto en la Ley Orgánica 2/86, de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, la Guardia Civil ejerce estas funciones, conocidas desde siempre como servicio peculiar del Cuerpo, en el territorio que no corresponda a la Policía Nacional, así como en el mar territorial y dedica a ello un total de 46.000 agentes, lo que supone prácticamente el 62% de todo su personal.