La Mesa del Congreso ha decidido que las ausencias durante el mes pasado de los diputados independentistas catalanes en la Cámara en señal de apoyo a la secesión no son causa suficiente para sancionarlos con algún recorte salarial como planteaba Ciudadanos. El informe encargado a los letrados sobre el asunto sólo ha servido para constatar que el reglamento del Congreso no establece vía alguna para vigilar la 'productividad' y presencia de los parlamentarios en plenos y comisiones, que sólo se privó en su día de los sueldos a los representantes de Batasuna en 1991 y 1992 (y porque no fueron nunca) y que para tomar medidas en la materia los grupos políticos tendrían antes que reformar las reglas de funcionamiento de la Cámara.
La propuesta de Ciudadanos, defendida por el vicepresidente Ignacio Prendes, ni siquiera se sometió a votación porque ningún otro de los miembros de la Mesa (del PP, PSOE y Podemos) estaba dispuesto a dar el 'sí' a la posibilidad de sancionar a los diputados de ERC y de PDeCAT por la 'huelga' de asistencia a dos plenos y varias comisiones que protagonizaron después del 1-O.
"Por mayoría, se ha decidido que no ha lugar a la incoación de un expediente sancionador pues no hay un hecho jurídico que vaya en contra del Reglamento", declaró después de la reunión de la Mesa la presidenta del Congreso, Ana Pastor.
Falto yo a trabajar por mis ideales, y ni te digo lo que me hace mi empresa.
Y ya ni entro a comentar la incongruencia la jeta de ser independentista, "proclamar la republica", y seguir cobrando de España.