MÁLAGA
La marea violeta pide en Málaga que la sociedad aísle a los maltratadores
Medio millar de personas participan en la marcha contra la violencia de género, donde se denuncian los recortes en políticas de igualdad
«Si no denuncio me mata»; «Después de treinta años de maltrato dije: 'Hasta aquí hemos llegado'». Estos testimonios individuales, a los que se les puede poner el nombre de María, Pilar, Carmen o Dolores, son el reflejo de un drama colectivo, el de la violencia de género. La marea violeta, compuesta por casi medio millar de personas, recorrió ayer las calles del Centro Histórico de Málaga, desde la plaza de la Merced hasta la de la Constitución, para denunciar públicamente este lacra y exigir a la ciudadanía el aislamiento social de los maltratadores.
«Hacemos un llamamiento a la ciudadanía para que aísle a los maltratadores». Así terminó el manifiesto leído por Julia Solana, una veterana activista por los derechos de las mujeres, a la conclusión de una marcha donde participaron mujeres, hombres, jóvenes, mayores, personas anónimas y políticos como el alcalde de la capital, Francisco de la Torre; los portavoces de PSOE e IU en el Ayuntamiento, María Gámez y Pedro Moreno Brenes, respectivamente; la coordinadora del Instituto Andaluz de la Mujer, Estefanía Martín Palop; o el coordinador provincial de IU y portavoz en el Parlamento de Andalucía, José Antonio Castro.
Convocados por la Plataforma contra los malos tratos a mujeres. Violencia Cero de Málaga en la marcha de Málaga se vieron muchos lazos violetas y un buen número de las participantes lucieron ropa -pañuelos, camisetas o jerséis- con este color que simboliza la lucha contra la violencia de género. En los carteles reivindicativos se leía: 'Ante la violencia de género. ¡No te calles!'; 'Igualdad sin violencia'; o 'El machismo, mata'. Junto a ellos consignas que animaban a la denuncia como 'Rompe el silencio, no estás sola', otras que pedían el fin del maltrato de genero 'Basta ya, ni una muerte más' o las de índole política como 'Más castigo para los asesinos'.
Algunos, como el minoritario Partido Comunista de los Pueblos de España (PCPE) intentaron politizar el acto con banderas de su formación -las únicas que se vieron- y consignas contra el Gobierno central.
Manifiesto
En el manifiesto se denunciaron los recorte en materia de igualdad por parte del Gobierno en el año 2012 y para el 2013. «Estamos en un momento de profundos cambios y desde la sociedad debemos involucrarnos en defender los derechos sociales de las personas», recogió el documento, donde también se criticó el tijeretazo en materia educativa, sanitaria, de políticas sociales y en la Ley de Dependencia por lo que supone de repercusión en las mujeres.
Asimismo, se lamentaron los anunciados cambios normativos en la ley del aborto, en el Código Penal sobre la violencia de género y respecto a la custodia compartida que permite a los padres maltratadores puedan compartir tiempo con sus hijos.
Antes de la lectura del manifiesto, un grupo de jóvenes repasaron algunos de los hitos históricos de la lucha por la igualdad y pusieron sobre la mesa hechos como las situaciones de desigualdad que sufren las mujeres en el mundo sometidas al patriarcado, la explotación sexual o la violencia.
Asimismo, se alertó sobre el hecho de que el 20% de los jóvenes españoles considera que ser agresivos les hace más atractivos por lo que se hace necesario acabar con ese rol de poder de los chicos y de sumisión de las chicas. En este sentido, cabe recordar que los datos oficiales evidencian que las víctimas de violencia de género son cada vez más jóvenes y los expertos advierten de la dificultad de este colectivo para identificar la violencia de género.
http://www.diariosur.es/v/20121126/malaga/marea-violeta-pide-mlaga-20121126.html
A ciertos rojazos se les llena la boca con lo de no excluir a ningún individuo de la sociedad, con apostar por la reinserción, etc. Eso sí, dependiendo de los intereses de cada uno, todos esos discursos pueden quedar aparcados para dar rienda suelta a otro tipo de deseos que poco tienen que ver con esos ideales más progresistas. Hipocresía en estado puro.
Y no sólo pasa con los maltratadores, claro. Políticos, banqueros, grandes empresarios, etc, también forman parte de la lista de personas que merecen ser aislados por la sociedad según ciertos sectores izquierdistas. Los demás individuos de la sociedad son víctimas de ésta; políticos y banqueros, entre otros, no.
Lamantabla.