Buenas.
No quería poner este hilo en el foro de Deportes porque quiero llevar el debate más hacia un terreno social y con diversos puntos de vista, no sólo de la gente que se deja caer por el foro de Deportes, los cuales en su mayoría tienen al fútbol como deporte favorito. Hecha esta aclaración, quiero entrar en un debate:
Durante estos días he tenido la suerte de tener vacaciones y poder trasnochar para ver las olimpiadas. He podido seguir nombres propios, de gente joven, y no tan joven ya, con sus historias y buscando un poco por Google de las nuevas promesas que vienen dando fuerte: Sarah Sjostrom, Orlando Ortega, Ledeky, Mireia Belmonte, Dafne Schippers, Schooling, Penny Oleksiak, Maialen Chourraut, Wayde van Niekerk... En fin unos ejemplos de los que se me vienen ahora a la cabeza. Me gusta documentarme cuando veo campeonatos e ir viendo su pasado y como han ido evolucionando.
Y viendo a esta gente ganar, que son la élite de sus deportes y al ver como la mayoría suben al podio llorando me dije un día "qué capacidad de sufrimiento deben tener estos, de estar años y años entrenando para jugárselo todo en unos minutos sabiendo que si fallan ya no habrá otra oportunidad hasta dentro de otros cuatro años, en el caso de que la edad te lo permita"
A raiz de esto, reflexiono y me digo: ¿No están los futbolistas demasiado "mimados"? Nos venden a los futbolistas de élite (los de los grandes equipos), como Messi, Cristiano Ronaldo, etc, como si fueran la hostia y su esfuerzo y superación fueran de super héroe cuanto menos.
Pero, si comparamos a estos futbolistas con deportistas que he citado arriba, que son gente que tiene jornadas de entrenamiento interminables de lunes a domingo casi, entrenan solos en muchos momentos de su preparación sin estar metidos tanto en una tónica de grupo cuando hay competiciones o largas largas sesiones de preparación, que saben que si fallan unas Olimpiadas, que digamos que son su "Champions League" no habrá más ocasiones de volver a intentarlo al año siguiente.
El futbolista, por su parte, no tiene un entrenamiento tan sacrificado, tiene la ocasión de redimirse cada año porque cada año tiene su "Champions" y si falla un año pues puede probar suerte al siguiente. Además, el futbolista puede tener un mal día y, aun así, ganar títulos, pues se escuda en sus compañeros. ¿Cuántos casos conocemos de estos que en las finales han estado desaparecido y, aun así, han levantado la copa? En otros deportes sería imposible. Como tengas un mal día echas a perder el trabajo de todos los años atrás.
Por no hablar de los sueldos. Sí, algunos como Phelps cobran al año un pastizal, pero son 4 casos así, y habiendo tenido que convertirse en el mejor de todos los tiempos. Sin embargo, casi cualquier futbolista de equipo puntero puede cobrar una pasta al año y, muchos de otros que no son equipos punteros, también pueden alcanzar perfectamente los dos millones de euros como mínimo.
Y me diréis, vale ¿y qué nos estás contando? No es una crítica al fútbol. Sin embargo, sí es una crítica a ese endiosamiento, creando debates continuos de si es mejor Messi o Cristiano Ronaldo, cuando ambos llevan una carrera bastante plácida, entre otros muchos, en comparación con un tío como pudiera ser Phelps o una tía como Mireia Belmonte. Por no hablar de otros ejemplos de algunos que se han dedicado a dar palos de ciego y siguen cobrando un pastizal y viviendo del cuento porque el fútbol, en muchas ocasiones, ni te exige ganar para seguir en la élite (véase casos como Balotelli, Cassano o cualquier mediocre que seguro que encontráis en vuestro equipo de fútbol favorito).
Desde luego, a mi se me ha llegado a hacer un nudo en la garganta a ver a gente recibiendo sus medallas o al ganar. Se les nota en la cara esa sensación de querer romper a llorar pensando en tantos años de esfuerzo y sacrificio hasta conseguir ganar y tener su pequeño momento de gloria. Incluso se me ha hecho el nudo con gente que ni era de mi país ni conocía de antes.
¿Qué opináis vosotros de este tema? Me gustaría saber vuestra opinión.