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Contundente mensaje del presidente del Parlament, Roger Torrent, que ha comparecido pasadas las 10:00 horas desde el despacho de audiencias de la cámara catalana para anunciar que suspende el pleno de investidura previsto para este martes a las 15:00 horas si bien mantiene como candidato a la investidura a Carles Puigdemont y no propondrá a ningún otro. Un aplazamiento destinado a desenredar la “chapuza jurídica” que a su juicio ha supuesto la resolución del TC que, sin una petición explícita al respecto en el recurso del Ejecutivo central, dictaminó el sábado que Puigdemont ni ningún otro diputado puede ser investido de manera telemática o por delegación.
Torrent ha dado instrucciones a los servicios jurídicos de la cámara para que presenten alegaciones y, de hecho, aplaza el pleno hasta que el alto tribunal las resuelva, así como las que ha presentado al respecto el abogado de Puigdemont Jaume Alonso Cuevillas. De esta forma, Torrent emplaza al tribunal a pronunciarse además sobre el fondo del recurso presentado por el Gobierno central el pasado viernes, y sobre el que el TC evitó hacerlo para poner el foco en unas medidas cautelares que con la decisión de Torrent se mantienen pero pasan a un segundo plano.
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En todo caso, el presidente de la cámara ha advertido de que “ni un ministro ni un tribunal a 600 kilómetros de distancia decidirán quién es el presidente del Govern”. De hecho, el presidente parlamentario ha querido mostrarse “claro” cuando ha advertido de que “ni la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría ni el TC decidirán quién tiene que ser el president de Catalunya” porque “es a los diputados, escogidos democráticamente, a quienes les corresponde hacerlo”.
En este punto, ha recordado que cuando propuso a Puigdemont, no adoptó una decisión “aleatoria ni personal”, sino que era el “fruto de la voluntad mayoritaria de la Cámara”. Y “como esta voluntad se mantiene, no propondré a otro candidato”, ha querido aclarar.
La propuesta de Puigdemont como candidato no fue “aleatoria ni personal”, sino el “fruto de la voluntad mayoritaria de la Cámara”. Y “como esta voluntad se mantiene, no propondré a otro candidato”
En definitiva, el pleno queda aplazado “pero no desconvocado”, ha matizado. Se mantiene convocado y se celebrará “cuando aseguremos un debate con garantías”, se ha limitado a señalar. Torrent ha justificado la decisión en que la investidura de Puigdemont es “la voluntad” de la mayoría de los catalanes representada en la cámara, pero también ha expresado la voluntad de llevar a cago un “debate efectivo y sin injerencias”.
El presidente del Parlament también se ha expresado con dureza a la hora de acusar al Gobierno y al TC de pretender “vulnerar los derechos de millones de catalanes”, algo que “no lo permitiremos”, porque “no aceptaremos que se diga que los catalanes votaron mal”. Torrent ha reafirmado que “a pesar de todas las amenazas, iré hasta el final” para defender los derechos de todos los diputados y también los de Puigdemont a acudir al Parlament y ser investido, “porque la democracia no se suspende”, ha alegado.
“No aceptaremos que se diga que los catalanes votaron mal. A pesar de todas las amenazas, iré hasta el final”
En pro de esta defensa, el dirigente se ha comprometido a garantizar su inmunidad, tal y como el propio Puigdemont le reclamaba en una carta remitida este mismo lunes, y ha insistido en que Puigdemont sabe que la defensa de los derechos de los diputados “no es solo una obligación sino también lo que mueve el ejercicio de su cargo”.
Sobre el TC ha lamentado la “chapuza jurídica” que resolvió el sábado y ha afeado que se haya tenido a bien reunirse de urgencia un sábado pero “no para admitir a trámite” el recurso del Ejecutivo, tal y como se le pretendía, sino “para fijar condicionantes que nadie le había pedido”. De esta forma, ha reprobado al tribunal que “sin ningún tipo de petición previa ordene a la cámara” algo que sólo compete a los diputados. Una decisión que Torrent achaca a la necesidad de “no desacreditar el fraude de ley” que suponía el recurso del Gobierno.
Ante estos hechos, “la voluntad de los catalanes es un mandato y este mandato nos e suspende”, ha garantizado.
