#150 Estás centrándote en un caso tan extremo que creo que estás perdiendo el argumento real.
No sé si hago un favor a la discusión contestándote a un ejemplo extremo y personalizado, pero bueno...
Si violasen a mi hija y la dejasen embarazada no sé cómo reaccionaría, más allá de con profunda rabia, tristeza, quizás furia, quizás culpa. Si me dijese que quiere tener el hijo, igual hasta la trataría de convencer de que no fuese así, pero si me lo argumenta desde la bondad maternal, que seguramente sea la bondad más pura, y desde el argumento de que el bebé no tiene ninguna culpa, a pesar de todo, me conmovería y sentiría que mi hija es de una calidad humana extraordinaria. Y en cualquier caso siempre me va a tener a su lado como padre.
Hay una moralidad intrínseca al ser humano, atemporal, acultural, es inherente a la condición humana. De ahí se deriva parte del conjunto de los principios. Actuar en consecuencia con tus principios tiene más valor en cuanto el camino que requiere seguirlos es más y más duro. Lo fácil, es tener principios flexibles que te los saltas porque hay alternativas más fáciles. Pero si son principios flexibles no son realmente principios. Una persona que es capaz de tomar la decisión que le indica su moral, incluso cuando ese camino es tan extremo y cruel como el que señalas, me conmueve hasta el punto de admirarla.