#115 lo de los supuestos étnicos es una proyección que haces tú, yo en ningún momento hablé de eso.
"La unidad que nos da fuerza" es ideología, porque todo depende de la escala de la que estemos hablando. Depender de un organismo planificador central también es una gran debilidad.
Hablas de supuestos étnicos y descartas la colaboración entre unidades políticas independientes, como si fueran equipos de fútbol, igual el que parte de supuestos étnicos eres tú.
Yo no creo que el vasco sea superior al madrileño ni al canario ni al andaluz ni al asturiano, es más, yo considero que es madrileño el que vive y participa de la vida social de Madrid, y gallego el que lo hace en Galicia, tanto o más que el que nació en Galicia pero vive en Barcelona desde hace décadas. Otra cosa son las raíces de cada uno, que para mí no son un motivo para diferenciar a nadie ante la ley. Vamos, que la tierra es del que la trabaja, pero aplicado a esto.
Lo que sí creo es que los intereses del madrileño no siempre coinciden con los del gallego, y eso en el mejor de los casos da lugar a acuerdos de mínimos, pero en el caso normal da lugar a que se impongan los intereses de uno sobre los del otro.
A escala global la situación sería aún peor, y a escala local este problema se diluye. Por eso la escala es uno de los factores más importantes en todas las decisiones políticas, y sin embargo nunca se tiene en cuenta. No es lo mismo monopolizar una industria en tu barrio que en el continente europeo.
Por eso creo que cuanto mayor es la escala, menor debe ser el grado de imposición de las leyes, que es justo lo contrario de lo que sucede con un planteamiento centralista, cuanto más grande, más autoritario, en un estado global no cabe ni el "si no te gusta vete a Andorra".
Y cuanto mayor es la escala, más graves son las consecuencias de la corrupción, un problema que existirá mientras existan los conflictos de intereses, que van a existir mientras exista lo colectivo y lo individual, es decir siempre. Podemos minimizar el beneficio individual que se pueda sacar a los cargos públicos o incluso abolir los, pero siempre habrá delegados, siempre habrá responsables, siempre habrá gente que meta la mano en la caja y lo mejor es tener muchas cajas pequeñas de las que robar calderilla porque el daño producido es menor, no solo económicamente sino también a nivel institucional.
Más grande también suele significar más insostenible y tendente a romperse pero prefiero dejarlo aquí porque ya es bastante largo.
La ruptura de España en cachitos más pequeños no significa que haya que dejar de colaborar en muchísimas cosas, es más, eso es una necesidad que no se puede ignorar, el elefante en la habitación, yo estoy hablando de una confederación, no de hacer cada uno la guerra por su cuenta sino de tener compartimentos estancos ante a corrupción y la inevitable imposición de la voluntad de unos sobre la de otros y las tensiones que genera y el tiempo y sufrimiento que cuesta gestionar esas tensiones a escala del medio centenar de millón de personas. Para ejemplo lo que pasó con ETA (y también el GAL como consecuencia), o todo lo que pasó en España en los años 30 y las consecuencias posteriores con una dictadura.