En la historia existen muchos francotiradores famosos y ahora seguramente se pongan de "moda" con el estreno de "El Francotirador" de Clint Eastwood que narra la historia de Chris Kyle quien tiene el polémico honor de ser el francotirador más letal de Estados Unidos con 160 bajas confirmadas con un fusil de precisión aunque la cifra podría ascender a aprox 250 con el uso de otras armas.
Pero Kyle, aunque es el francotirador más letal de Estados Unidos, está lejos de ser el francotirador más letal del mundo.
Simo Hayha
Nacido en 1905 y muerto por causas naturales en 2002.
Durante la Guerra de Invierno de 1939-1940 entre Finlandia y la Unión Soviética, sirvió como francotirador contra el invasor ruso. Actuando a temperaturas que oscilaban entre -20° y -40° C, y vestido completamente de camuflaje blanco que fue lo que le dio el apodo de White Death o "Muerte Blanca".
Hayha nunca usó una mira telescópica ya que temía que el reflejo de la lente pudiera delatar su posición y pese a las gélidas temperaturas que podían llegar a -40 gratos demostró una capacidad prácticamente sobrehumana para permanecer quieto a veces durante días esperando el momento oportuno sin que el frío mermara su capacidad para realizar complejos cálculos para obtener su letal eficacia.
Era capaz de controlar su respiración de forma que el vapor no lo pudiera delatar, otra de sus técnicas infalibles consistía en amasar la nieve cercana para que el disparo no la removiera y pudiera delatarlo.
A Simo Hayha se le atribuyen 540 muertes aunque sólo se pudieron confirmar 505 realizadas con el fusil M28 Pystykorva, una variante finlandesa del fusil soviético Mosin-Nagant, siempre sin el uso de mira telescópica.
Además se confirmaron otras más de 200 bajas con el subfusil finlandés Suomi KP/-31.
El terror que producía White Death al ejercito ruso fue enorme, quienes no dudaron en bombardear zonas y usar artillería pesada en los lugares donde creían que podía estar aunque sin éxito.
Finalmente Hayha fue alcanzado poco antes de terminar la guerra por una bala que le destrozó parte de la mandíbula y la mejilla izquierda, quien pese a todo permaneció vivo y sin consciencia durante un tiempo. Despertó de su estado de coma justo el mismo día que finalizó la guerra.