Galicia tenía el pasado mes de octubre un total de 122.214 personas inscritas como demandantes de empleo, de las cuáles 54.932 cobraban la prestación contributiva por estar en el paro. Todos y cada uno de los inscritos van a ser contactados en los próximos días por el Servizo Público de Emprego de Galicia para que firmen de manera expresa el llamado «acuerdo de actividad», a través del cual se comprometen a buscar de manera activa un puesto de trabajo y a aceptar las entrevistas laborales o cursos de formación que se les brinden. En caso de no cumplir con este requisito, serán borrados «de forma inmediata», asegura la Xunta, de las listas de demandantes perdiendo la antigüedad y los derechos asociados a esta circunstancia.
El Consello de la Xunta, reunido ayer en la localidad coruñesa de Noia, le dio luz verde a un informe impulsado por el conselleiro de Emprego, Comercio e Emigración, José González, sobre el procedimiento sancionador que se seguirá contra usuarios inscritos como parados en el SPEG y que no hacen lo suficiente para incorporarse a cursos de reciclaje o capacitación formativa o para adherirse a los itinerarios trazados para la búsqueda activa de un puesto de trabajo.
Lo que se persigue con esta medida, explicó el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, es afinar las listas de demandantes de empleo, «de xeito que só figuren as persoas que realmente estean interesadas en atopar un traballo», explicó.
De hecho, el servicio público ha detectado que hay un porcentaje apreciable de ciudadanos que están registrados como parados, pero que, por diferentes motivos, no tienen interés en activarse laboralmente, pues rechazan las opciones e itinerarios que se les ofrecen para encontrar un empleo. Son perfiles muy diversos, que pueden ir desde personas que están de baja por alguna circunstancia, que renunciaron a trabajar por razones de conciliación o de cuidados de algún familiar o incluso que son perceptores de otras ayudas sociales, como la Risga o el ingreso mínimo vital.
Comunidad pionera
Por tanto, a partir de este mes, precisó Rueda, se contactará a todos los inscritos para que firmen el llamado acuerdo de actividad, figura incluida ya a nivel de Estado en el Ley de Empleo del 2023, y que se trata de un pacto suscrito entre el servicio público de empleo y el demandante, en el que se establecen derechos y obligaciones para ambas partes con el fin de incrementar la empleabilidad. Galicia es una comunidad «pionera», dijo el jefe del Ejecutivo autónomo, en aplicar esta disposición para todos los parados, perciban o no algún tipo de prestación.
En cuanto a los efectos que tendrá el no firmar ese compromiso para buscar un empleo de forma activa, el conselleiro José González resaltó que, en el caso de los parados con prestación, serán borrados de la lista y perderán la paga durante los días que tarden en suscribir el acuerdo. Si se trata de parados sin subsidio, «entenderase que non están buscando activamente traballo», explicó, y también serán excluidos como demandantes, y en la práctica perderán otros beneficios sociales que puedan tener como solicitades activos de empleo, como podría ser el caso del tramo de la renta de integración social o Risga vinculada a esta condición.
El cribado de los desempleados de larga duración eliminó al 22 % de los registrados
La decisión del Gobierno gallego de purgar las listas de desempleados para que en las mismas figuren tan solo las personas que de verdad buscan un puesto de trabajo viene precedida de otra iniciativa, desplegada ya en junio del año 2023, y que consiste en hacer un seguimiento intensivo de los demandantes de empleo de larga duración. En este programa entran los usuarios que llevan más de cinco años inscritos y que, además, no realizaron ningún curso formativo ni acudieron a citas de orientación laboral en los últimos dos años. También se incluyen todos aquellos demandantes que no confirmaron su disponibilidad para optar a tres ofertas de empleo en un año y las que carecen de un itinerario laboral activo.
Desde el lanzamiento del programa intensivo se atendió en las oficinas de empleo de Galicia a 47.500 personas registradas como parados de larga duración. A algo más de 7.000 se les encontró un empleo, otros 5.600 iniciaron un itinerario de mejora de la empleabilidad, mientras que 15.800 actualización su demanda de empleo y sus circunstancias actuales. Ahora bien, también hay otras 10.400 personas, o lo que es lo mismo, el 22 % de los convocados, que fueron borradas en el cribado y dejaron de figurar como demandantes «dun xeito voluntario», recalca la Xunta, pues se les ofrecieron otro tipo de recursos para satisfacer sus aspiraciones.
De cara al próximo año, la Xunta destinará 1,6 millones de euros a la digitalización del SPEG para avanzar en la definición de las categorías y perfiles de los demandantes de empleo, así como en su seguimiento intensivo, para seguir purgando las listas.
Luego se olvida la peña de esto, venden números en unos meses y éxito en la gestión bajando el numero de parados.