Y digo que lo digo porque lo digo porque si dijera que lo digo porque me han dicho que lo diga me obligarán a volver a decirlo añadiendo que no lo digo porque me han dicho que lo dijera, y que cuando he dicho que lo decía porque me obligaban a decirlo, mentía tan miserablemente como cuando dije que el Caballero Milana ha mamado la polla del Excelentísimo Agon de los Meditadores.
Igur Nebli, Miquel de Palol