Una vez terminado el juego el rey y el peón vuelven a la misma caja.
Pocas veces quien recibe lo que no merece agradece lo que recibe , asi que es mejor darles su merecido y lo agradecerán con creces.
Una persona cambia por tres razones: aprendió demasiado, sufrió lo suficiente o se cansó de lo mismo.
Nunca te avergüences de haber sido valiente
Si te acostumbras a abandonar, siempre hay una excusa
Nunca se derrumbó...sólo la muerte lo dominó...