Es que estáis hablando de unas cosas muy raras, esfuerzo, meritos, valer y trabajar agusto en algo que te guste y tal. Y hombre, eso está bien, ser una persona viva, esforzarse por hacer bien las cosas es muy importante, pero tiene que ir acompañado de resultados.
El esfuerzo no sirve si no tiene resultados, el mercado laboral no es un mundo justo, seguramente sea mejor o no vuestro trabajo no os va a gustar, el trabajo no le gusta a "nadie", sólo a unos pocos privilegiados, el trabajo es trabajo y ha de hacerse, todos los días guste o no, que será no. Puedes trabajar en algo que te guste, pero tener un ambiente muy malo que lo convierta en un infierno.
Y podéis esforzaros, podéis trabajar en algo que os guste, podéis ser muy productivos, compenetraros bien con el resto de personas, implicaros en ello totalmente, más allá de lo que dice el contrato (siempre un error), y que os despidan, por que un jefe os tiene envidia, o porque un compañero sin que te enteres te a puesto a parir a tus espaldas y tienes una fama que no mereces, o un inutil logra llevarse siempre el mérito y está mejor valorado, o simplemente contratan al hijo del jefe.
Podéis ser muy buenos, esforzaros mucho, y ser incapaces de trabajar en equipo, o de trabajar en cosas varias categorias por debajo (cuando hay que hacerlo) para terminar algo.
Podéis hacer todo eso, que os contraten, y estar por debajo de algun inepto con enchufe, o no inepto pero caradura, con enchufe, que es la verdadera clave para llegar a donde se pretende. Y podéis ser buenísimos y estar toda la vida, debajo de gente que se aprovecha de vuestra habilidad, se lleva casi todos los méritos, no la hinca, y están (laboralmente) y así te lo demuestran por encima, y sabiendo que eso no va a cambiar nunca.
Eso es un trabajo, cosas como "merecer", "trabajar en algo que podía hacer otro", "no rendir al máximo porque no es lo que más te gusta", me suenan realmente raras.
Además un buen trabajo, es el que una vez terminado te permita desconectar, pero puede que no, puede que apenas te dejen desconectar, y aunque no estes trabajando tengas la cabeza allí, y pensaréis que que chorrada que no es para tanto, pero un año, y otro, y otro y otro más y uina decada y otra, al final esas cosas pasan factura.
Ale sin chapa extraña que me ha quedado.