Las fotos no pueden ser más grandes? Me dejo los ojos xd
Tragedia.
#151 Más grandes? Solo están en pequeñas las de área, ya que me gusta que abarque todo el mapa para marcar donde están los escuadrones enemigos. El resto de imágenes, esta tomadas al máximo nivel del juego. De todas formas... pongo círculos en las zonas de asedio, para que no tengáis que volveros locos buscando.
#150 Si ni siquiera puedo asegurar a mis enanos y al comercio desde arriba, como pretendes que ahonde más? Y un enano también tiene construcciones exteriores, siempre y cuando tenga relaciones con el mundo exterior.
#149 una pena lo de las muertes. Melbil debe aprender a controlarse y pensar en dirigir un poco, se vuelve loco y no para.
#152 No me refiero al zoom del juego sino a la resolución de la imagen, las de área las podrías dejar tal cual salen de capturar la pantalla me refiero. Igual solo soy yo.
Va a haber que acelerar esas obras, como te pille el toro otra vez con media fortaleza fuera contruyendo murayas, se lia parda.
CAPITULO 18
A grandes perdidas, porrazo en la cabeza
Finales de Otoño del 256
Uno de los Otoños más oscuros que SilverSilk ha conocido. El clima se había rendido al luto de la fortaleza, soplando fuertes ráfagas de aire que al atravesar los pasillos sonaban como un llanto lastimero. Pocos culpaban a Melbil por sus malas ordenes, y menos aún los enanos que combatieron a su lado. Pero a pesar de ello, Melbil se sentía responsable. Lejos de entrar en depresión, envió su culpa al extremo de su martillo, volcando en él toda ella. Imparable, fiero, una leyenda entre los suyos. Esa sería su gesta.
Por otro lado, la fortaleza intentó seguir con la rutina en los campos y talleres. Se envió a los mineros a acabar de pulir la colina. El trabajo no era demasiado difícil, aunque como todo en esta vida, no esta carente de riesgos. La lluvia había estado cayendo de forma continua y pesada, y la tierra estaba demasiado húmeda para el proyecto...
El derrumbe pilló por sorpresa a los mineros, y alertaron a la fortaleza. Por suerte, ningún minero se hirió de gravedad, salvo algunos rasguños.
Astesh, aún con muletas, le dio a Mafol una lista de lo que el ejercito requeriría. 9 reclutas nuevos, armaduras ligeras, armas de entrenamiento, y varias mejoras para los barracones. Al mes, 6 de los 9 reclutas que pidió aparecieron por el cuartel, y fueron asignados a un nuevo escuadrón, equipados con armaduras ligeras y armas de madera. Supervisó personalmente los entrenamientos, y les corrigió algunos errores. Se daba por satisfecho. Fue cuando volvía a la armería para recoger la nueva armadura que le estaban haciendo, cuando oyó el cuerno.
Los informes de los ballesteros no dejaban dudas, otro Minotauro. Las obras proseguían por el Norte, por lo que todos los efectivos estaban posicionados para proteger a los obreros. Sus soldados mas cercanos eran los nuevos reclutas. Su mejor opción era atraerlo hacía una posición intermedia, a la vez que lo alejaba del Norte. El Minotauro avanzó desde el Suroeste en dirección a la puerta comercial, y allí lo esperarían. Nada más asomar la cabeza por la esquina del deposito comercial, una andanada de virotes fueron a parar a su cuerpo, seguido de la carga brutal de los reclutas.
El resto de efectivos llegaron, pero el Minotauro ya estaba en el suelo con la respiración entrecortada, agonizando. Poco tiempo habría de celebrar la proeza de los reclutas, ya que el cuerno sonó de nuevo.
Los únicos vigías permanecían en la torre de los ballesteros, y reaccionaron con demasiada lentitud. El pescador cayó al primer golpe, y los ballesteros lanzaron la primera tanda de virotes. No tardaron en matar a todo cuanto se movía.
Había que sumar una nueva baja en esta maldita guerra, que no tenía pinta de acabarse...
Parece que las imagenes se ven mas grandes, gracias, antes algunas eran dificiles de ver bien como dijo Danrex. Sigue asi, esta quedando muy guay en AAR 
#160 Las imágenes son igual de grandes que siempre. Solo que no incluyo ninguna de área, o de texto, que para que me quepa en la foto y no se pase de formato, tengo que alejarlas. No soy editor de fotografía... uso el paint.
#161 Las de área ponlas según salen de imprimir pantalla, el foro las encajará pero luego nosotros podemos verlas a tamaño completo. No va a quedar descuadrado ni nada.
Los ballesteros tienen aim.
como te han dicho, el foro ajusta la imagen, da igual que sea 3000x2000, luego incluso podemos abrirlas en otra pestaña y verlas a tamaño completo
#164 aim = puntería, vamos, que tus ballesteros no fallan una ^^
claro, saca pantallazo y recorta después a la ventana del juego
#165 ahm... puntería... Es el primer batallón de ballesteros que creé. Dos de ellos son ya Élite (y empezaron con nivel 3). Si supiese grabar vídeos, os subía lo chulo que queda unir los dos batallones (en total 9 enanos ballesteros), en la sala de matanza de prisioneros. Todos los ballesteros disparando a la vez, y cayendo un troll por cada andanada de disparos. Es estupendo.
#166 Más que recortar la ventana del juego, es más cómodo si haces alt+ImprPant y lo pegas en un fichero abierto en el paint.
Nosotros aprendemos Dwarf Fortress, tú aprendes informática xD
CAPITULO 19
De emboscadas va el asunto
Finales de Verano del 257
Había pasado año y medio desde que dieron comienzo las obras exteriores de defensa, y en ese tiempo no se había visto demasiada actividad goblin. Astesh intuía que estaban preparando un golpe extremadamente potente, y tenían que reunir las tropas suficientes. Claro esta... los goblins no son conocidos por su inteligencia, y daba fe de ello lo que esta temporada trajo.
A principios de Otoño apareció una pequeña emboscada en la puerta Este de la muralla exterior, al parecer, atraidos por los humanos. Pero como he dicho antes... se desvelaron antes de tiempo. Uno de los mecánicos avisó a Mafol cuando encontró un brazo goblin pegado a una de las enormes sierras que custodiaban la entrada. Este a su vez, pasó el aviso a Astesh, que envió a su escuadra a investigar, mientras ordenaba a los ballesteros protegerlos desde la colina. Cuando ya estaban llegando, una cabeza salió disparada por encima de la muralla, y cayó a los pies de Melbil. Se miraron unos a otros, y apretaron el paso hasta la entrada.
Allí se encontraron con la emboscada, ya descubierta, siendo acribillada a saetas ( de ballesta, que no son demasiado flamencos estos enanos). Solo tuvieron que machacar las cabezas de los que estaban en el suelo, y limpiar un poco las armas de sesos. Cuando estaban terminando de patear culos verdes, los ballesteros se giraron y dispararon a través de la muralla Sur. No había más que decir, Astesh salió por la puerta Este, y se dirigió a otra pelea.
Poco cabe decir de tan pobre gesta... ya que los humanos habían dado rápida cuenta de los furtivos. Menos suerte corrió su Diplomático, que por aquel entonces salía de la Fortaleza. Se encontró con un secuestrador goblin, que lo rajo de arriba a abajo. Por suerte, sus guardias le seguían de cerca, y lograron sacarlo del entuerto y llevarselo... creo que con vida.
Ahora entramos casi en principios de Invierno, del año 257. A espera de que llegase la caravana del Reino, Astesh dio ordenes de ocupar la recién construida Torre Sur, de modo que pudiesen vigilar la zona a la par que entrenaban. El mismo se situó en la entrada Este, ahora con más trampas. Los gritos de un pescador (maldita manía tienen esos goblins a los pescadores...) alertaron a los ballesteros, que al momento estaban asomados a las fortificaciones de la muralla.
Era imposible que los goblins avanzasen con tanto sigilo, y la razón de tan buena maniobra evasiva se debía a los dos lideres que iban con ellos. Dos humanos.
La caravana enana apareció justo detrás de los emboscadores. Por suerte, los ballesteros ya estaban dando cuenta de ellos cuando los primeros guardias se lanzaron al ataque. Astesh avanzó por el este para cortarles la retirada.
Solo un muerto enano, el pobre pescador que iba a recoger no se que cosa con una caja... Eso sí, entre la cantidad de trabajo de las obras, el tener que aprovisionar el deposito comercial, y retirar los cadáveres y su posterior saqueo... a ver quien es el guapo que tiene tiempo de limpiar la muralla.
CAPITULO 20 (YA???)
Aprendiendo a volar
Finales de Invierno del 257
Vaticinado por Astesh, el asedio llegó. Pero las obras básicas habían concluido, y la muralla exterior resistiría la primera carga de enemigos.
Superados en número, solo quedaba cerrar las puertas, y apostar ballesteros en las torres. La primera escuadra de ballesteros, que residen en la Torre Sur, llenó sus aljabas, y salieron a los caminos interiores de la muralla. Los recibieron las flechas goblins, que impactaban contra las almenaras de la muralla sin causar ningún daño. La segunda escuadra de ballesteros se apostó en las Torres Hermanas (al norte de la muralla), su objetivo, el batallón de martillos que asomaba sin ver lo que se le venía encima. Mientras los ballesteros dañaban la moral, y se llevaban un par de goblins por delante, las escuadras "Comandante" y " Corre Ven Acércate" esperaban al pie de la Torre Sur. Mafol por su parte, intento aligerar la pesada carga de los goblins, e ideó una pequeña trampa especial... abrió la puerta Oeste, para cerrarla poco después, con letales resultados.
Por otra parte, en la muralla Este se apostaban demasiados enemigos, incluidos los malditos trolls. Ya tenían previsto aquello, por lo que se había montado una maquina de asedio de buen calibre que apuntaba en esa dirección.
Una pena que se fallase el primer tiro, y lograsen romper la bomba de agua. Astesh gritó la orden de abrir el puente Oeste, para rematar a los enemigos que aún rodeaban las murallas, y acabar rápidamente con el asedio. A su voz se abrió el puente, saliendo en tromba contra todo enemigo cercano.
Un paseo por el Sur, apareciendo por el Este, y terminando la ronda por los rezagados del Norte. El asedio había terminado.
Al día siguiente, el contable fue a la sala del trono. 29 Bajas enemigas, más dos ladrones. 3 capturados, y un ballestero herido leve por una flecha perdida.
BONUS:
#172 no se si es impresión mía, pero se me está haciendo un poco repetitivo siempre con asedios.
Crítica constructiva eh no te la tomes a mal xD
Pedazo de muralla.
#173 Será lo que le sucede supongo, si no le aparece un dragón en el fondo de la mina no nos lo puede enseñar xd
#173 Si, también me lo parece a mi. Por eso estoy intentando matar de forma distinta. De momento megabestias no me han llegado ningunas, solo minotauros. Por otro lado... viendo la cantidad de comentarios en temas de "guerra" y en temas más tranquilos, da a entender lo que se quiere ver.
Tranquilos, que ahora empieza la época de proyectos, y volveré a la guerra Mafol/kubuk/Stin/ Astesh.
A mi me está gustando mucho. Me mola ver como vas superando asedio tras asedio, con la cuenta de victimas y tal... XD
#175 Una pregunta boba,para k me expliques asi por encima.Ya k me queda muchisimo aun para eso.Como haces las torretas a diferentes niveles para ballesteros,y como haces k haya huecos donde disparen,ventanas o lo k sea..ojos de buey k se llaman.
#177 Los huecos esos son las fortificaciones. Si las haces en piedra natural, alisa el muro, y despues graba fortificaciones (creo que es d-a) Si lo haces desde un muro construido por ti, lo mismo. También puedes construir directamente las fortificaciones con (b-C-F).
Las torres... pues construyendolas con muros, suelos, rampas, escaleras... así hasta el nivel que quieras. Uso bloques para transportarla rapidamente, y multiplicar por 4 la cantidad de material.
#178 Joder...aun me falta,no se ni hacer muros...fortificaciones,es para hacer las ventanas desde donde disparan no? bueno,ya te pillare al IRC un dia.K tengo el finde fatal,liadisimo de currelo.Gracias kerohssss
CAPITULO FINAL
SilverSilk
Finales del año 257
Tras 6 años en píe, SilverSilk se empezaba a considerar una obra maestra. La gran expansión que había sufrido en terrenos del Reino de Ducim, preocupaban tanto a enanos, humanos, como a elfos. Las fronteras de SilverSilk avanzaban inexorablemente por los refugios de los elfos, talando sus arboles y expulsandolos de los dominios. Los humanos por su parte, deseosos de frenar ese avance que acabaría con muchos de sus pueblos, entraron en guerra contra SilverSilk, y enviaron agentes a todos los pueblos para reclutar soldados. Los elfos, a pesar de sus grandes diferencias con los humanos, pactaron una alianza sin precedentes. Los enanos de Ducim acordaron ayudarlos en su gesta, enviando enanos por los túneles inferiores, para presentar batalla en su terreno, las cuevas.
Así dio comienzo la Gran Guerra de la Era de las Leyendas. Atacados por diversos frentes, SilverSilk se vio confinada tras sus altas murallas, mientras Ducim y los suyos, cavaban por debajo para sorprenderlos, y llevarles la guerra al interior de la Fortaleza.
Año 260 (2 años de asedio que parece no acabar)
Ducim logró abrir una brecha en SilverSilk, y atacó con todas sus fuerzas. Varios meses de escaramuzas llevaron a la Fortaleza a un gran deterioro interno. Demasiados enanos habían perdido a sus familiares y amigos. Astesh, aún comandante del ejercito, tenía sobre sus hombros la pesada carga de la defensa. A pesar de todos los muros de contención levantados a través de las cavernas inferiores, las trampas ocultas en sus pasadizos, y los mismos soldados agotados que protegían esas entradas, parecía que llegaba la hora de sucumbir. Kubuk por su parte, había dejado de salir de sus habitaciones, y se mostraba huraña con todos los que pedían audiencia. Mafol era el encargado de lidiar con los asuntos de la Fortaleza. El último ataque de los enanos resulto grave para ellos. Al amparo de la noche, mientras los soldados patrullaban, dos enanos se colaron y sembraron los campos con sal, acabando con su fuente de alimentos.
La situación empezaba a ser desesperante.
Uno de los patrulleros interiores oyó gritos en las cavernas. Debía tocar el cuerno de guerra para alertar a los demás de un inminente ataque, pero había algo raro. Escuchó con atención durante unos momentos. Si... los gritos no eran de carga, sino de terror. Una bestia colosal había irrumpido en las cavernas, y estaba presentando batalla contra los enanos invasores. El soldado corrió a dar la noticia al comandante. No habría otra oportunidad como esa en toda su vida. Llamó al ejercito a filas, así como a todos los civiles con edad y fuerza para sostener un arma. Dispuso a sus mejores hombres al frente de las puertas de las murallas, mientras los ballesteros se disponían detrás de los civiles, otorgando un valioso resguardo para los civiles. Hizo sonar el cuerno de guerra. Los puentes se bajaron con un sonido chirriante, debido a sus años de inactividad. La tromba enana salio de SilverSilk dispuesta a morir, pero antes llevandose por delante a tantos enemigos como pudiesen.
La carga inicial pilló desprevenidos a los grupos de mercenarios que cortaban la linea de suministros de la fortaleza y sus caravanas. El Sur se tornó rojo, mientras el Este y el Oeste ardía con furia. Los caballeros humanos, montados en caballos de guerra, entraron en batalla demasiado tarde como para salvar las vidas de sus mercenarios. Los elfos por su parte, después de dos años en tierras desconocidas, y sin el amparo de sus árboles, no tuvieron oportunidad alguna frente al grupo liderado por Melbil. Parecía sonreír la buena suerte a SilverSilk, hasta que los grupos elfos y humanos que acampaban un poco más lejos, llegaron con animales de guerra, catapultas, y torres de asedio. Muchos enanos habían caído en la batalla, y se vieron obligados a replegarse de nuevo detrás de sus murallas, pero sin tiempo para subir los puentes. El enemigo había entrado en las murallas, y hacía retroceder a los enanos contra la colina. Fue entonces cuando, a lo lejos, sonó un cuerno de guerra, aullando como si la muerte misma viniese a reclamarlos.
La mismísima Reina Sakzul, acompañada de sus ejércitos, y pertrechada con armadura y maza, apareció delante de las murallas, cargando contra la retaguardia de los asediadores. Avivados por la aparición de su majestad, Stin instó a los enanos a combatir una vez más. La fiereza de la batalla sería contada por todas las razas. El asedio se rompió.
Fueron los elfos, habiéndose visto mermado su número por cientos, los primeros en intentar firmar una paz con la Reina Sakzul. Los siguieron los enanos, que tuvieron que ser rescatados de la bestia contra la que luchaban en las cavernas inferiores. De los humanos aún no se sabe nada...
Ducim accedió a darle el poder a Sakzul de todo el territorio de SilverSilk, con la promesa de un matrimonio entre su hija mayor, y el heredero al trono de The Rapid Iron, el príncipe Urist, hijo de Sakzul.
¿Quien dijo que no se podían forjar verdaderas leyendas en SilverSilk?
