#217 Ya, bueno; supongo que me habrá pillado a mí con el paso cambiado. Estoy de acuerdo con lo de ser un peón a lo largo de toda la saga, aunque a mí me ha parecido que se hace más hincapié en este último.
#216 No creo que pertenezca a la Escuela de Mensis, ya que no se ve por ahí ninguna de sus jaulas características. Sin embargo, sí que vemos tarros con ojos hasta reventar, exactamente iguales a los que podíamos ver en Byrgenwerth. Supongo que, como has dicho, el lugar entero ha sido succionado por la pesadilla. O también puede que sea un simple recuerdo de un edificio que ya no existe (fue derruido) en el Yarnham real. El por qué hay un gigante de la iglesia en el segundo piso ya me abre un enigma sobre el que no puedo arrojar demasiada luz.
Hablando de la Iglesia; otra cosa que me mosquea (y sobre la cual he trazado mi propia teoría) son los clérigos/gigantes de piel blanca que vemos deambulando por el Distrito de la Catedral.
Por su aspecto se me antojan muy similares a los pthumerios que nos encontramos en las Mazmorras del Cáliz; por otro lado, no veo muy factible que estos accedieran a ser los siervos de la Iglesia de la Sanación bajo ninguna circunstancia. Por otro lado, aun teniendo rasgos monstruosos, tampoco los calificaría de "bestias" (al menos no en el sentido en que este juego nos las plantea). Todos los humanos que han sucumbido a la "maldición" y mutado, aun difiriendo en tamaño y otros pormenores, presentan características comunes las cuales huelga repetir aquí. Estos "clérigos" tampoco exhiben rastro alguno de una transformación violenta (están muy bien vestiditos y tal), y parecen guardar celosamente la Catedral (no son criaturas inconscientes).
Mi teoría es la siguiente: al igual que los pthumerios (que para mí no son más que humanos mejorados), estos individuos lograron transformarse en "superhombres" consumiendo Old Blood, contando también con el suficiente nivel de autocontrol para no ceder a sus instintos más básicos y sucumbir a la plaga. La diferencia entre los clérigos más pequeños y los gigantes es que estos últimos han sufrido una mayor hipertrofia derivada de esta, llamémosla, "mejora genética".