#1018 Lo que yo quería dar a entender es lo siguiente:
Para mi el árbol es un gran empresario que comercia con manzanas. En un principio las cosas le van bien y puede decidir a quien se las vende y a quien no dependiendo de su ideología. Cuando los consumidores, toman conciencia de que es una actitud xenófoba y discriminatoria boicotean su producto hasta que se ve obligado a vendérselas a todos por igual.
Es la unión de los ciudadanos lo que consigue cambiar la conducta racista del empresario, al que obviamente no se le ha ablandado el corazón, ha tenido que subordinarse al poder del dinero.
Lo mismo se puede decir de la jornada de 8 horas, que la disfrutamos (los que pueden) gracias al sacrificio de miles de obreros.
La igualdad y los derechos laborales no han sido un regalo de las clases dominantes, sino el fruto (muy bien reflejado en el cuento) de la lucha de las clases dominadas.