Ups, se me olvidó poner la crónica del concierto de Valladolid por si a algún mediavidero le interesaba:
Coincidiendo con el concierto de The Bellrays y en un caluroso jueves de junio, llegaron al Café Teatro Russian Red en formato acústico y a dúo, es decir, únicamente la voz y la guitarra de Lourdes Hernández y Manuel Cabezalí (Havalina) para defender en directo y frente al público vallisoletano lo que es el prometedor primer disco de una de las bandas de moda españolas, I love your glasses (Eureka Records, 2008).
A las 21:10, más de media hora después de lo anunciado (¿algún día los conciertos empezarán más o menos a la hora prevista?), con un calor infernal en la planta baja del Café Teatro y un poquito apretados, dio comienzo el concierto y eso tuvo lugar en mitad de conversaciones, ruido y cañas y Coca-Colas que se beben... pero ese murmullo que hubiera durado un par de minutos en un concierto normal, en esta ocasión y por culpa de la voz de Lourdes, apenas duró unos segundos. Y entonces, lo único que se escuchó fue la voz y la guitarra de Russian Red. Y nadie volvió a abrir la boca durante un largo rato.
Una a una fueron desgranando todas las canciones del disco, empezando por No past land y Take me home. Al llegar a They don't relieve (la última canción en incluirse en el trabajo y el single del disco) y por ausencia de la pandereta todo el público se animó a dar palmas para llevar el ritmo de la canción (¿y dónde estaría la pandereta?).
Las canciones siguieron, el público y los artistas sofocados por el calor infernal que hacía en el reducido espacio del bar, pero la música siguió. Siguió una canción nueva (Hawaiana), piropos hacia Lourdes, anécdotas entre canción y canción. Y llegó Cigarettes y entonces como un susurro las voces de los allí presentes se alzaron y un coro cantaba junto con Lourdes y Manu el estribillo y parecía que aquel momento no iba a acabar nunca.
Y para terminar una versión de Roy Orbison, Crying, y un par de canciones más, ya que el calor impedía seguir durante mucho más tiempo. Y como bis y de regalo otro Cigarettes y otra vez el susurro que en esta ocasión se alzó y dejó únicamente la voz de los asistentes y la guitarra mientras todos decían eso de que nunca fumaba los cigarros que encendía.
Hay que decir que un par de días antes del concierto se agotaron las 100 entradas que se habían puesto a la venta de forma anticipada, lo que para un “concierto alternativo” (un concierto no organizado por el ayuntamiento, la Junta o alguna institución) es sin duda al menos síntoma de dos cosas: Russian Red gusta y hacer “conciertos alternativos” en Valladolid es posible, es más, es necesario para satisfacer a un público que ya no está latente, sino que está deseoso de salir a la calle y de escuchar propuestas musicales de calidad.
Excelente concierto de Russian Red, un poco corto pero intenso, y queda claro que “el fenómeno myspace” es real, que Lourdes no es un artista retocada de estudio, sino que en la verdad es que el disco no hace justicia a la voz y a la emoción que derrocha en sus conciertos, con esa cara de niña tímida detrás de su guitarra blanca y de sus labios rojos de mujer.
http://www.valladolidwebmusical.org/cronicas/08/russian_red/index.html