La Policía Nacional ha detenido a un empresario que explotaba laboralmente a sus trabajadores en una nave de Zamudio (Vizcaya), donde ocasionalmente hacían lo que su jefe denominaba una «maratón», consistente en trabajar desde las siete de la mañana hasta las nueve de la mañana del día siguiente. Solo disponían de una hora libre para comer mientras permanecían toda la noche encerrados en las instalaciones de la empresa.
Según la Delegación del Gobierno en el País Vasco, el arresto se produjo este martes pasado, tras una investigación iniciada a partir de denuncias de explotación laboral formuladas por varios de esos empleados. Todos son extranjeros y sin permiso de residencia en España, por lo que no tenían contrato de trabajo. Cobraban 5 euros la hora.
Los agentes comprobaron que sus relatos eran verídicos y les concedieron el carácter de testigos protegidos.
Según explicaron, si sufrían algún accidente laboral, el jefe les aleccionaba para que no dijesen dónde se habían herido.
Agentes de la Brigada de Extranjería y Fronteras de Bilbao y funcionarios de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social de Vizcaya acudieron a la empresa, situada en el polígono industrial Ugaldeguren (Zamudio), identificando en su interior a ocho trabajadores. Cuatro de ellos estaban sin permiso de residencia ni contrato de trabajo, por lo que se detuvo al empresario que regentaba el negocio. Este ha quedado en libertad tras prestar declaración en dependencias policiales y con la obligación de presentarse ante el juzgado que instruye la causa.
Se le acusa de un presunto delito contra los derechos de los trabajadores, enfrentándose, además, a una posible sanción económica de más de 70.000 euros por infringir la legislación en materia laboral y de Seguridad Social.
Cuánto empresario de la peor calaña esta saliendo a la luz últimamente ¿no?