#15 Pues la cosa está en dejarle en un sitio donde se sienta agusto y no sea muy grande, cuanto más cobijado se sienta mejor.
El mío se sube a mi cama y se tumba encima de lo que me pongo para dormir.
Lo más importante que aprendí, es no decirles nada, les dejas en el sitio donde se sientan más agusto y no les dices: "oye que me voy, pórtate bien" ni poyadas parecidas, ni tan siquiera les mires, te vas y punto.
Para irle acostumbrando lo mejor es que se les deje solos poco tiempo al principio y que JAMÁS vuelvas si les oyes llorar o ladrar.
Y si vuelves a casa de clase o trabajo y están llorando, no les mires, no les hagas caso, no les digas nada, simplemente ignórales.
Si vuelves y están dormidos o portándose bien, dales una galleta o un premio.
El mío pasó de no poder quedarse solo porque siempre se ponía a ladrar y llorar a dormirse cada vez que se queda solo, y se ha acostumbrado en un par de meses.
Saludos y suerte