#238 El cabrón, como tú dices, necesita un par de hostias, o más bien educación para no tener que llegar a ese extremo. Y el marginado necesita espabilarse, de acuerdo, pero no a través del bulling. A ver si ahora vamos a tomar el bulling como una terapia. Estamos de acuerdo que una mala experiencia puede ayudar a forjar el carácter, o una condición adversa. Pero también puede hundir a una persona o dejarla marcada para siempre. Nadie quiere sufrir una desgracia para poner a prueba su carácter. Y menos una que se prolonge a lo largo del tiempo. ¿O a tu te gustaría sufrir un acidente de tráfico para que te descubran lo jodida que es la vida, espabilar y salir con el carácter fortalezido? No, claro que no.
Apuntar al chico a karate o a fútbol, claro, porque al chico no puede gustarle la danza y la lectura, no? ¿Le anulamos los padres entonces obligándole a hacer algo que no desea? ¿Le obligamos a él a cambiar cuando él no ha hecho nada malo? Resulta que su único crimen es que le guste leer Tolkien, lo que le gusten los chicos en lugar de las chicas, o ser gordito, o estar triste, o tener el pelo de colores. NO.
¿Matar la individualidad? Eso es una salvajada.
Es muy fácil culpar a la víctima. ¿Por qué no se defendió? Sucede también, por desgracia, con muchas mujeres que sufren malos tratos, físicos o psicologicos, en sus propias casas, que están anuladas y cuya voluntad y autoestima no es la de una persona normal. Cuando eres un niño aún no eres una persona, aún no tienes consciencia de como funciona el mundo, tu mundo es el patio de la escuela y eso es una selva. Para nosotros, que tenemos la suerte de vivir en el primer mundo, la infancia debería ser una alegría. Siempre, un buen recuerdo. La infancia debería ser una toma de contacto con la vida, por eso se protege tanto a los niños. Son los cimientos. Y sobre ello se construye la propia vida, la propia personalidad. Nadie tiene el derecho a quitarte eso. Nadie. ¿Aprender a palos? Vivimos en un mundo civilizado, se me ocurren mil maneras mejores de aprender. Empezando por la empatía.
Y por favor, usa comas y puntos.
#237 Frente a un padre preocupado por su hijo hay diez que no se preocupan lo más minímo. Y los que lo hacen lo hacen a nivel superficial (notas, partidos de fútbol, si tiene novia). Pero una persona es más que las calificaciones de la escuela, igual que un adulto es más que el sueldo que gana. Ahora vendrá mucha gente a decir "tanto tienes, tanto vales". Es una falacia, y puede que sea parte del problema. Educamos a los niños para que sean los mejores, para que compitan entre ellos, para que, como dices, triunfen, pero deberíamos educarlos para ser felices según sus propias creencias, no las que la sociedad trata de imponerles. Pero ¿Cuántos padres crees que tratarán de abrirles los ojos a sus hijos? ¿Cuántos padres crees que aceptarán que un título o mucho dinero no te hará feliz? Todos queremos lo mejor para nuestros hijos, pero hay que diferenciar entre lo que queremos nosotros, lo que la sociedad espera de ellos (es mierda, una forma de controlar el pensamiento crítico y la personalidad propia) y lo que él quiere, que finalmente es lo único que le hará ser feliz porque es lo que nace de su ser más íntimo y personal.
Es complicado. No se puede cambiar a la gente. Pero podemos intentar cambiar nosotros y, quizás, tratar de hacer ver a los demás que hay más posibilidades que vivir en esta sociedad tan competitiva que no lleva a nada.
También opino que vivimos en una sociedad del "yo". Pasa entre los adultos. En un puesto de trabajo son pocos los que están dispuestos a sacrificarse por pelear por los derechos de todos, mientras que la mayoría mira hacia otro lado, por ejemplo.
Curiosamente, la gente que ha sufrido bulling luchará contra sus demonios internos toda la vida. Y habrá días mejores y días peores, pero siempre pelean. O lo intentan. Lo cual es admirable en una sociedad donde los adultos tienen más excusas que motivos, más fachada que verdadero carácter. #232 Ánimo, a ti y a todos los que alguna vez sufrieron. Hay gente buena en el mundo, gente que merece la pena. Es complicado abrirse, y es inevitable que te hieran, pero si perdemos la esperanza de creer en los demás, por muy malas experiencias que hayamos tenido, lo habremos perdido todo. Nos lo habrán quitado todo.
#240 Si tu pudiste defenderte y te sirvió de algo, enhorabuena. Ya han contado historias de gente que se denfendió y que no le sirvió de nada, también hay que dejar claro que hay niños que no saben defenderse o que no pueden o que creen que no pueden. No es tan fácil como lo pintas. Aparte de que la violencia poco puede hacer para solucionar los efectos más psicologicos de esta práctica, como la ofensa en el amor propio o la soledad. Defiendes una posición insostenible, los críos no son malos por naturaleza, al contrario. No son la segunda venida de Hitler, pero la falta de empatía en esta gente es bastante preocupante y roza lo macabro. ¿Una persona que se burla de otro, le hace llorar, le pega y al momento se va de risas con sus colegas? Es evidente lo que está mal.