#178 no crees que el director del centro de alertas sanitarias, en estrechisimo contacto con el ministerio de sanidad, tendría que decir algo al respecto?
Yo creo que si, pero la realidad es que no solo
No dijo nada, sino que le pareció bien.
De Sanidad no digo nada. Un ministerio vacío de competencias y al mando un filósofo cuota del psc.
Y así nos va.
#187 claro que no, el no se enteró de ese tweet. Ni de la pandemia en general.
Por hacer una analogía con mi trabajo, es como si yo salgo a volar sin mirar la meteorología en destino, cuando hay un huracán en destino, cargando el mínimo de combustible. No se podía prever lo que sucedió después.
#188 No veo por qué el director del centro de control de alertas sanitarias va a tener que estar enterado de los tweets que ponga el community manager del ministerio de sanidad. No es el ministro de sanidad. Su función es otra. A ver si te crees que los directivos de los cuerpos nacionales de emergencias están al tanto de los tweets que pone el community manager de la policía nacional por poner un ejemplo.
#189 el CM pone lo que le sale de los mismísimos, no? Así, a lo random.
Podría haber puesto: “viaja a Wuhan y come murciélago, te encantará”... y todos tan felices.
#190 Pues en muchas ocasiones sí, pone muchísima mierda y cosas random, exactamente igual que el CM de la policía nacional.
Os empeñáis en darle a Fernando Simón muchísimas más atribuciones que las que tiene que es ser director del centro de alertas sanitarias, trabajo que lleva ejerciendo casi 10 años. Única y exclusivamente. Ni es el ministro de sanidad, ni forma los comités, ni decide nada la mayor parte de las veces.
Su trabajo es no alarmar a la población, lo cual tendría consecuencias nefastas.
Es de primero de epidemiologia.
#195 Mejor que decir que habrá 2,o 3 contagios locales, o que no ve ningún impedimento en ir a manifestaciones, a pocos días del estado de alarma.
Las dimisiones en este país son animales mitológicos.
Que asuma sus declaraciones y sus responsabilidades.
#196 Ya veo las dimisiones en el resto de países que están a la orden del día sí. Salvo España está todo el mundo dimitiendo por doquier.
#197 Mal de muchos consuelo de tontos.
Neil Ferguson dimitió.
¿Algo que decir de las afirmaciones del señor Simon semanas/días antes de la pandemia?
#198 No dimitió por cómo ha manejado esta pandemia, por no haber tomado las acciones correctas durante su gestión o por declaraciones realizadas en público si no porque le pillaron santándose la cuarentena que impusieron a toda la población para ir a ver a su amante. Y no es porque UK sea precisamente un ejemplo a seguir en cómo manejar la pandemia.
Ojo, que no hay que alarmar a la población. Que nos ponemos a decir que habrá solo casos puntuales y animamos a ir a eventos multitudinarios por no alarmar. ¿Qué es lo peor que puede pasar? Solo unos miles más de muertos. Pufff nimiedades.
Lo de los colgates total blanqueador estos que tenemos en el hilo es para grabarlo y tenerlo a mano para echarse unas risas o unos lloros a su costa. Porque es tan penoso que no se sabe si hay que reírse o llorar.
#199 Dimitió porque hizo las cosas mal. En este caso Fernando Simón no va a dimitir tras semejantes declaraciones previa al estado de alarma.
¿Ese es el nivel de profesional que tanto quieren blanquear?.
Del señor Illa mejor ni hablar.
#200 Cuando leo comentarios com el tuyo yo personalmente me descojono. Pero oye, cada uno que llore con lo que quiera.
Lo que probablemente sorprende de Simón es la falta de arrogancia. Es un experto que, frente al lenguaje bélico, a las maneras duras y a la condescendencia, frente al estereotipo del sabiondo, maneja códigos opuestos
Fernando Simón se ha convertido en el tipo amable que se cuela en casa cada día para hablarnos de la pandemia. El experto es un fenómeno fan pandémico del que se hacen memes, chistes y canciones. Claridad, calidez, cercanía, calma, mesura. Puede que Fernando Simón se esté convirtiendo en un icono de la nueva masculinidad o, más bien, en la prueba de que la masculinidad puede expresarse de otra manera.
Hay un factor que ha ayudado a que las cualidades de Simón sorprendan y agraden aún más: su contraposición a las figuras de autoridad que durante las primeras semanas participaban en las ruedas de prensa diarias. Los responsables de la Policía Nacional, la Guardia Civil y las Fuerzas Armadas comparecían cada día al lado del experto y performaban el ejemplo más clásico de masculinidad y autoridad. Caras de una seriedad casi impostada, enfadada a veces, tonos engolados, dureza en las frases y en la expresión no verbal.
A este despliegue se añadía un lenguaje bélico que parecía responder más a la necesidad de justificar la presencia de uniformados que al anhelo de la población de sentirse cuidada y debidamente informada. Hasta los uniformes hacían que nos fijáramos más en aquel tipo de jerseys y camisas estándar que simplemente salía a contar lo que sabía.
Lo que probablemente sorprende de Simón es la falta de arrogancia. Es un experto que, frente al lenguaje bélico, a las maneras duras y a la condescendencia, frente al estereotipo del sabiondo, maneja códigos opuestos. Despliega conocimiento, pero con humildad, reconoce errores o, al menos, la posibilidad de tenerlos, utiliza un lenguaje cuidadoso que deja a un lado la competición. En suma, no escuchamos a alguien que busca reforzarse mediante formas expansivas o que quiere demostrar todo lo que sabe sin importar lo demás, sino a un hombre que cuenta y responde, con sus aciertos y sus errores.
"Entiendo perfectamente las necesidades de información y poquito a poco voy aprendiendo cómo funciona lo que se publica, lo que no se publica. Pero me va a perdonar el periodista, creo que hace un flaco favor a España hablando de suspender o no suspender en este proceso. En este proceso vamos juntos y, si suspende uno, suspendemos todos. Tenemos que tener cuidado con algunas de las expresiones que usamos, nadie ha suspendido, todas las comunidades autónomas, todos los servicios de salud han hecho un trabajo excepcional", decía en una de las últimas ruedas de prensa en el mismo tono suave de siempre. En su afirmación mostraba empatía y reconocía aprendizaje. También reprendía a un periodista, pero lo hacía sin perder las formas y para reconducir la conversación del terreno de la competencia al de la cooperación.
En suma, es lo opuesto a la masculinidad a la que solemos asistir. La masculinidad rehúye la humillación y reconocer aprendizaje o mostrar empatía y humildad es entendido muchas veces como tal. La virilidad tradicional se construye sobre las formas agresivas, la competición y la necesidad de quedar por encima de tus interlocutores. También sobre la explicación permanente a otros entendida como la certeza de que el conocimiento y la palabra propia siempre es pertinente y no necesita de los demás. A Simón le escuchamos casi con la sensación de que a él también le interesaría escucharnos.
Así que, en medio de esta pandemia, asistimos a una forma distinta de ejercer públicamente la masculinidad. Ojalá cunda el ejemplo y tengamos más 'simones' y menos 'señoros'.
https://www.eldiario.es/zonacritica/Fernando-Simon-nueva-masculinidad_6_1026157382.html
#204 Pues me ha parecido muy coherente lo que ha dicho en la rueda de hoy. ¿Cuál es tu objección concretamente? Y hablo de sus palabras en el vídeo (que estoy seguro que ni te has visto), no del resumen sesgado que has pillado de twitter.
Hay que ver estas cosas con perspectiva de género. La obligatoriedad de uso de mascarillas es de señoros, que el no usarlas haya sido una de las causas del descalabro pandémico en occidente es irrelevante.
#207 ¿Qué tal si por una vez, escuchas por tí mismo la declaración COMPLETA y así puedes forjar tu propia opinión en vez de esperar a que te den una prefabricada en twitter? Toma, te lo facilito incluso. Te dejo el vídeo marcado justo en el momento donde empieza la pregunta:
#208
Está clarísimo y se le escapa en varias ocasiones mientras intenta marear la perdiz. Como no hay para todos... y sigue por sus santos cojones sin admitirlo, y luego lo maquilla con las "complicaciones"... que "la mjor mascarilla son 2 metros de distancia"? JA!
#209 ¿Él qué tiene que admitir? Está diciendo varios puntos muy claros:
1.- El uso de las mascarillas es MUY recomendable y beneficioso.
2.- La mejor medida no es la mascarilla si no el distanciamiento social. Mantener esos dos metros de distancia es la mejor medida de todas.
3.- Hay grupos donde el uso obligatorio de mascarillas puede ser un problema y por tanto la obligatoriedad para todos y por igual no es adecuada. Si se llegase a plantear el hacerlo obligatorio habría que hacerlo con mucho cuidado y considerando todos los escenarios.
4.-Hay que priorizar la disponibilidad de mascarillas para los grupos de riesgo.
¿Ha dicho alguna mentira? ¿Razones científicas para llevar la contraria a alguno de esos puntos?
