Mis muy estimados mediavidensis,
mañana, sábado, quiero ir por fin al zoo. Llevamos semanas planteándonoslo en el ICTMM (a.k.a. "diechupipandien") y es, a la postre, hora con independencia de pronósticos meteorológicos adversos. ¡Es más! Tanto queriendo y tanto imposible siendo... incluso mejor que llueva, truene o nieve para disfrutarlos en esplendor.
Animalitos hacinados en sus jaulas para uso, goce y disfrute del hombre, que no la mujer, cuán mejor ahora sucios de barro, indignos y mojados. Inmortalizar esas caras animales plenas de tristeza humana. Verlos, temblorosos, recogidos en las esquinas de sus rencintos. Tiritando bajo nuestras inquisitoriales miradas. Ansiando la muerte, liberación de nuestro yugo.
Pues ya lo dijo Dios, quien de polvo hizo al patriarca del hombre y de su costilla de él a una Eva rediviva; que poblado el mundo de bestias en el quinto día lo convertía en un eden para nosotros, con sus brutos sometidos a nuestra especie.
Lo disfrutaremos.
Y a vosotros... ¿qué opiniones os suscitan los zoos?, ¿el prestigio de los zoos cae por la humanización animal?
Que Dios os bendiga.