Laura Archera Huxley, terapeuta, escritora y viuda de Aldous Huxley, con quien compartió la visión del potencial del ser humano y al que ha dedicado casi 50 años desde su muerte para preservar su legado y ayudar a los demás (sobre todo a niños) a conseguir la felicidad, murió el jueves en su casa en Hollywood Hills, a los 96 años tras una dura lucha con el cáncer.
Conoció a su marido en 1948, 16 años después de que la novela antiutópica Un mundo feliz lo catapultara a la fama como un gran pensador, escritor y crítico social. Se casaron en 1956, un año después de la muerte de su primera mujer, y durante los siete años siguientes fue su musa y su compañera en la exploración de la consciencia que ayudó a detonar el movimiento psicodélico de los años 60.
Tras su muerte en 1963, el mismo día que aquel en el que asesinaron al presidente Kennedy, decidió dedicarse a evitar que sus trabajos quedaran en el olvido.
Uno de sus últimos proyectos era llevar Un mundo feliz a la gran pantalla. Ahora está en desarrollo por parte de un estudio cinematográfico importante.
También ha sido autora de varios libros, incluyendo la una de las primeras guías de autoayuda, You are not the target, éxito en ventas en 1963. También escribió This timeless moment en 1969, memorias de su vida con Aldous, Between Heaven and Earth, One-a-Day reason to be happy y "The child of your dreams".
En 1978 fundó la organización sin ánimo de lucro Children: Our Ultimate Investment, cuyo objetivo era fomentar el desarrollo óptimo de lo que ella llamaba "posible humano". Colaboró con colegios de California y Gran Bretaña, especialmente con adolescentes para prevenir embarazos no deseados.
Huxley, que nunca tuvo hijos biológicos, describía su meta como "hacer que los niños amen al mundo, en vez de odiarlo como hacen tantos".
Tras la muerte de Maria en 1955, Aldous pidió matrimonio a Laura con rodeos, preguntándole si "alguna vez le había tentado el matrimonio". Cuando ella dijo que sí, él le preguntó "¿Crees que sería entretenido viajar a Yuma y casarnos en un area de descanso?", a lo que también contestó que sí, y se casaron en una capilla de un área de descanso en Arizona.
Por aquel entonces él ya había comenzado a experimentar con drogas psicodélicas, especialmente con mescalina (su libro de 1954 sobre sus experiencias, The Doors of Perception, inspiró a Jim Morrison para llamar a su banda The Doors).
Él invitó a Laura a tomar LSD con él mientras escuchaban el Cuarto Concierto de Brandenburgo de Bach, y tuvieron "revelaciones estéticas".
Pero al contrario que su amigo, Timothy Leary, que se convirtió en el gurú de la generación psicodélica, Huxley dijo que tanto ella como su marido opinan que aunque la LSD tiene un gran potencial para expandir la consciencia, debería usarse "muy cuidadosa y religiosamente".
Como dijo un personaje de su última novela, Island, tal droga "puede llevarte al cielo, pero también al infierno".
Cuando Aldous Huxley estaba muriendo de cáncer, pidió a su mujer una dosis de LSD, que ella le concedió con 2 inyecciones separadas por unas pocas horas. Murió tranquilamente poco después de la segunda. Según escribió Laura en su memoria, "tuve la sensación de que estaba interesado, aliviado, tranquilo".
(sólo he traducido un poco, si alguien se siente con ganas es libre de destacar lo que crea interesante).